Un trabajo del Instituto de Biomedicina de Valencia, centro de investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas ha identificado el mecanismo molecular por el que medicamentos de la familia de los inhibidores de la gama secrétala, como el Semagacestat, utilizados para combatir la enfermedad de Alzheimer, causan efectos secundarios.
El estudio publicado en la revista Life Science Alliance, ha sido coordinado por Marcal Vilar, en colaboración con el laboratorio de Lucía Gutiérrez-Chávez.
Los inhibidores del complejo de la gama secretasa se desarrollaron a principios de este siglo con la esperanza de impedir la generación del péptido beta-amiloide a partir de la proteína llamada APP, uno de los principales causantes de la enfermedad de Alzheimer. Uno de estos medicamentos, llamado Semagacestat, llegó a ensayos clínicos, pero en la fase III fue rechazado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos en 2010, al presentar los pacientes con Alzheimer un empeoramiento de sus síntomas cognitivos y problemas ulcerosos en la piel.
Más información: La Razón