La Asociación Alzhéimer Bierzo reabrió ayer oficialmente la vivienda destinada al tratamiento de pacientes que están en primera fase de la enfermedad. Un centro ubicado en el centro de Ponferrada y activo desde hace años que, debido al aumento del número de enfermos, ha tenido que ser remodelado y mejorado. Unas obras de acondicionamiento que han permitido a la asociación crear un aula de informática con la que introducirán a los usuarios en el mundo de la tecnología a través de actividades sencillas, aplicando nuevas terapias para «crear nuevas redes neuronales y estimular la gimnasia mental», según explicó la directora de Programas, Ana Pilar Gutiérrez. Y es que el aplicar nuevas terapias y trabajar desde los desconocido permite desarrollar esas partes del cerebro que todavía no han sido afectadas por el alzheimer y contribuye a frenar su avance.
Alzhéimer Bierzo cuenta con ocho nuevos ordenadores en los que trabajarán los 33 pacientes que asisten diariamente al taller de memoria que en este centro se imparte. Una vivienda cedida hace años por el Ayuntamiento de Ponferrada y ahora remodelada gracias también a una inversión cercana a los 5.000 euros de la Administración local. Fue el concejal de Acción Social, Luis Antonio Moreno, el encargado de dar el visto bueno a los trabajos. En su comparecencia, el edil destacó el papel que realiza en toda la comarca la Asociación Alzhéimer Bierzo y garantizó fondos y ayuda municipal para sus programas porque «su trabajo es crucial para ralentizar esta enfermedad y mejorar las condiciones de vida de los enfermos».
Alzhéimer Bierzo trabaja con un total de 150 pacientes repartidos entre el centro de día de Flores del Sil, el inmueble del centro de Ponferrada y las unidades de respiro de Bembibre, Fabero y Cacabelos. Una cifra que va en aumento. Ahora, además, ha incorporado un servicio de fin de semana en el centro de día que ha permitido crear dos nuevos puestos de trabajo. La plantilla global de este colectivo es de 29 trabajadores, entre psicólogos, enfermeras, terapeutas o trabajadores sociales.
Fuente: diariodeleon.es