La neuróbica o “gimnasia mental” fue un término acuñado por el neurobiólogo Lawrence Katz en 1999, para describir ejercicios mentales diseñados para ayudar a mejorar la actividad cerebral. Esta basada en la teoría de que, la estimulación sensorial y el ejercicio de acciones y pensamientos inusuales, pueden producir reacciones químicas en el sistema neurobiológico que estimulen la creación de nuevas dendritas y neuronas en el cerebro.
Cerca del 80% de nuestro día a día, está ocupado por rutinas, que a pesar de tener la ventaja de reducir el esfuerzo intelectual, esconden un efecto perverso: limitan al cerebro. Con el paso de los años nuestro cerebro va perdiendo capacidad productiva, por ello el entrenamiento es un factor ralentizador del mal funcionamiento.
Es muy pronto todavía para contar con testimonios científicos decisivos sobre la efectividad de la neuróbica, pero los resultados obtenidos hasta ahora parecen indicar que, de la misma manera que nuestro cuerpo necesita ejercicio para estar en forma y equilibrado, la mente también necesita de estímulo. En nuestra vida cotidiana hay un importante número de rutinas que son llevadas a cabo de forma mecánica, e incluso inconsciente.
El Dr. Katz, que fue autor del libro Mantenga vivo su cerebro, trabajó en el desarrollo de programas de ejercicios para la mente, lo que ha sido definido como gimnasia neuróbica. Su objetivo es estimular los cinco sentidos con actividades que nos obligan a prestar atención a lo que estamos haciendo. No se trata de aumentar nuestras tareas diarias si no de hacer nuestras rutinas de forma diferente para lograr estimular nuestro cerebro.
El profesor Okamoto, de la Universidad Federal de Sao Paulo, puntualiza que el ejercitarnos con la neuróbica no nos asegura que mejore nuestra memoria, pero si vamos a desarrollar capacidades y vamos a evitar la pérdida de algunas destrezas.
Llevándolo a la práctica lo que hacemos con la gimnasia mental es invertir el orden de algunas de nuestras rutinas cotidianas, así alteramos la percepción sin alterar la rutina. El objetivo es realizar de una forma consciente acciones que generan reacciones cerebrales y emocionales.
Según la especialista Mariuza Pregnolato, el establecimiento de una rutina neuróbica produce efectos en nuestro organismo que son los que nos ayudan a estimular la producción de nutrientes cerebrales para desarrollar mas células neuronales.
La neuróbica no puede devolvernos un cerebro mas joven pero si puede ayudarnos a mantener y mejorar el que tenemos. Como dice la Dra. Pregnolato “no podemos aumentar nuestra capacidad cerebral, pero con el ejercicio usted puede activar esas áreas del cerebro que dejó de usar por falta de entrenamiento. La única manera de estimular al cerebro es ejercitándolo, por eso quien siempre atiende a su cerebro reduce las probabilidades de sufrir enfermedades cerebrales como el mal de Alzheimer”.
Los autores de la “aeróbica de las neuronas”, Katz y Rubin, descubrieron que tiene el efecto de mantener el cerebro saludable y ágil, a través de la creación de nuevos patrones de actividad en nuestro cerebro.
"Los ejercicios usan los cinco sentidos para estimular la tendencia natural del cerebro a formar asociaciones entre diferentes tipos de información; cuando usted se viste en la oscuridad, por ejemplo, pone a sus sentidos en situación de alerta. Si la visión se dificultó, otros sentidos se agudizarán en compensación".
Si es gratis, da resultado y puede ser divertidoeX03¿por qué no probarlo?. Tal vez los ejercicios neuróbicos que hagamos ahora marquen la diferencia en el futuro.
Fuente: hechosdehoy.com