-
El MIT identifica las áreas de mejora para la acción política y advierte: una inyección moderada de capital a niveles elementales podría traducirse en grandes progresos...
-
...Pero una relajación podría ser catastrófica en ámbitos como el alzheimer, la conquista espacial, la alimentación mundial o los ciberataques
A raíz de la caída de la inversión pública en innovación en Estados Unidos, el Massachussetts Institute of Technology (MIT) ha elaborado el informe 'The Future Postponed' (El futuro pospuesto), que busca ser una llamada de atención sobre la pérdida de peso específico de los norteamericanos en 15 áreas donde una inversión al nivel más básico, en caso de desplegarse, podría suponer una gran mejoría.
Sus autores, un grupo de 30 investigadores y profesores del MIT, señalan que el objetivo de este estudio es «combatir el gran déficit de innovación que existe entre Estados Unidos y otras naciones» y «estimular el interés político sobre estos campos». Unas áreas en las que el informe alerta sobre cómo China avanza vertiginosamente ante el estancamiento de EEUU y de las que INNOVADORES trae una selección de las más importantes.
ALZHEIMER
Pese a que afecta a más personas que la mayor parte de los tipos de cáncer, el sector del I+D+i contra esta enfermedad se encuentra paralizado, advierte el informe. «En los dos últimos años, la Federal Drug Administration aprobó 19 nuevos medicamentos en la lucha contra el cáncer, y un buen número se encuentran en proceso de aprobación. Sin embargo, ningún nuevo medicamento contra el Alzheimer se ha aprobado, a pesar de que más de cinco millones de americanos sufren esta enfermedad y se espera que esta cifra se duplique en los próximos años», recoge el informe.
A día de hoy, el Alzheimer supone 150.000 millones de dólares y 17.000 millones de horas de trabajo de cuidadores familiares. Además, se espera que los costes totales asociados a esta enfermedad lleguen al 1,2 billones de dólares en 2050, indica el estudio.
«Existen oportunidades reales de progreso. Bien investigando el proceso de envejecimiento del reloj biológico o bien abordándolo con medicamentos», afirma el MIT.
A pesar de que este informe elogia iniciativas públicas que han declarado 'La guerra al Alzheimer', lamenta que tan sólo un 6% de las ideas que recibe el National Institute of Aging (encargado de este campo en EEUU) acaben disponiendo finalmente de una financiación para su desarrollo.
Una línea de investigación que sugieren los autores es un mayor estudio de la comunicación neuronal para comparar mapas de neuronales de personas sanas con las de enfermos de Alzheimer.
Asimismo, el documento sugiere también profundizar en las causas genéticas del Alzheimer para desarrollar procesos de control e influencia para combatir la enfermedad.
CIBERSEGURIDAD
«El hackeo de los sistemas informáticos para el robo de datos comerciales y personales, así como otro tipo de amenazas supone un gasto de miles de millones de dólares cada año. Entre sus objetivos, se encuentran grandes almacenes (Target y Home Depot), medios de comunicación (The New York Times), grandes bancos (Morgan Chase) e incluso compañías tecnológicas como Microfost», explica el informe. A nivel global, cifra los costes asociados que contribuyen a utilizar sistemas tecnológicos en 400.000 millones de dólares al año.
"Las inversiones en áreas prioritarias contra los ciberataques son insignificantes"
Un campo que, más allá de las empresas, afecta a la seguridad nacional de los Estados. «Se cree que China ha estado copiando diseños de los aviones más avanzados y que puede estar diseñando armas para deshabilitarlas y contarestarlas», señala. Además, existe el riesgo de daños en «sectores estratégicos como líneas de abastecimiento de petróleo, redes eléctricas o redes de telecomunicaciones», añade.
«Una causa fundamental en la lucha contra la ciberinseguridad es la debilidad en los medios a la hora de identificar individuos y puntos de acceso que, a día de hoy de hoy , se limitan passwords tecleados», critica este estudio. Para llegar a un entorno más seguro, el informe señala cuatro áreas en las que debería trabajarse en investigación, desarrollo e innovación.
La primera es el diseño de nuevos ordenadores que hagan especial hincapié en el control y en la metodología formal de los procesos para impedir ataques. La segunda, pasa por una investigación económica y de comportamiento que de lugar a la expansión e los sistemas de identificación múltiple de los consumidores. Asimismo, recuerda que debe ahondarse en cómo la ciberseguridad afectará a las relaciones internacionales, ya que la falta de capacidades para cifrar el origen de un ataque, así como su carácter multilateral, hacen imposible conocer su atribución.
El informe señala que existe una oportunidad para reducir «de manera reseñable la vulnerabilidad y el coste de los ciberataques, pero que las inversiones en las áreas prioritarias o bien son insignificantes, o bien muy pequeñas».
EXPLORACIÓN ESPACIAL
En lo que respecta a la exploración espacial, el informe critica cómo el papel de los EEUU ha quedado relegado a un plano secundario de manera evidente tras hitos extranjeros cómo el aterrizaje de una sonda en un cometa por parte de la de la Unión Europea, y ve alarmante que países como India sean capaces de lanzar sondas alrededor del Planeta Rojo con un instrumental tan sofisticado como el americano.
"Los recortes de presupuesto en ciencia espacial relentizarán la investigación computacional"
El informe señala cómo la pieza central del programa espacial europeo norteamericano se centra en el lanzamiento del telescopio espacial James Webb. Con moderado optimismo, apunta que este telescopio «dará a los EEUU un papel de liderazgo en el campo de la astrofísica aunque sus costes y el recorte presupuestario en ciencia espacial relentizarán otras misiones y la investigación computacional, mientras que el resto de países continúan avanzando».
AGRICULTURA
Con la previsión un incremento poblacional de 7.000 millones a 9.000 millones hasta el año 2040, y con un pequeño margen de tierra cultivable sin explotar en el mundo, el informe señala como imperativo que «la productividad de los cultivos debe aumentar al menos un 50%». «Además», indica, «resulta critico prestar atención al contenido de esa comida debido a las generalizadas deficiencias en la dieta de hierro, vitamina A y otros micronuetrinetes».
Una problemática para la que «se requerirán innovaciones más fundamentales en la ciencia de las plantas, como integrar conocimientos de genética molecular, celular, bioquímica y factores fisiológicos en el crecimiento de las plantas».
EEUU sólo alcanza el 30% de la investigación en biología molecular
A modo de ejemplo, el informe destaca la modificación genética del arroz dorado en el que se ha añadido dos nuevos genes a la planta para acelerar las cosechas y enriquecerlas en vitamina A. «Cultivos autofortificados como éste podrían atajar la malnutrición con más efectividad que los tradicionales métodos», asegura
Un campo en el que recuerdan que «la inversión básica en investigación y desarrollo ya se encuentra muy por debajo de otros campos de la ciencia, a pesar de que el sector agrícola es responsable de más de dos millones de empleos directos en Estados Unidos y una fuente principal de exportaciones».
«El impacto de la inversión en este campo queda ejemplificado en las publicaciones científicas de biología molecular. Un área en el que el 70% de las investigaciones vienen de países de fuera de EEUU, especialmente de China y sus laboratorios», asegura.
ROBÓTICA
«Los robots y otras máquinas inteligentes fabricadas por el hombre como los drones o los coches sin conductor se han movido más allá de las fábricas y han encontrado nuevos usos en el campo del cuidado sanitario, el sector servicios e, incluso en los hogares», asegura el estudio.
La UE invierte 3.000 millones de dólares al año para asegurarse una cuota de mercado entre el 30% y el 40%
Sin embargo, el informe destaca que «mientras que Estados Unidos es un país líder en el uso industrial de robots, ninguna compañía norteamericana es un líder de mercado en su diseño y manufactura». Un factor en el que Japón, Europa, Corea del Sur y, especialmente, China están comiéndole la tostada a EEUU. El informe destaca por ejemplo que la Unión Europea destina anualmente 3.000 millones de dólares, mediante un esfuerzo conjunto público-privado que busca garantizar que se mantenga con una cuota de mercado de entre el 30% y el 40% dentro de una industria que se estima que llegará a los 70.000 millones en 2020.
El informe concluye señalando que «Estados Unidos ya está dependiendo de otros países para aprovisionarse de robots industriales» y que para mantenerse competitivo en este entorno de rápido crecimiento y mercados en evolución necesitará «una gran inversión en el área de robótica».
Fuente: elmundo.es