Muchas personas con necesidades especiales encuentran en algunos robots al amigo que no pueden ver en otros humanos. Y a pesar del miedo que podamos tener a que nos sustituyan, en la mayoría de las ocasiones, ayudan.
Paro es la foca robótica más famosa del mundo, que ha aparecido en series como Los Simpson y Master of None, y nació hace 15 años en el Instituto Nacional de Ciencia y Tecnología Industrial Avanzada de Japón como una herramienta terapéutica no farmacológica —así la ha reconocido la Agencia Estadounidense del Medicamento— que reduce el estrés y la ansiedad, activa la comunicación, favorece la autonomía y aumenta la autoestima.
“Su tacto suave invita a acariciarla y su peso, de dos kilos y medio, recuerda al de un bebé, lo que evoca emociones positivas a pacientes que han sido madres”, explica Rocío Alonso-Redondo, directora de comunicación de Adele Robots, la empresa que comercializa Paro en España bajo el nombre de Nuka. “Sin embargo, se ha evitado caer en su diseño en una imagen infantil, ya que su uso está pensado para personas adultas, aunque tengan deterioro cognitivo”.
Para más información: El País