El neurólogo de la Universidad de Georgetown, en Estados Unidos, R. Scott Turner dice estar "sorprendido" por el número elevado de enfermos de Alzheimer con prediabetes detectado en un estudio nacional, a pesar de ser pacientes que ya están bajo cuidado médico y tras excluir del análisis las personas con diabetes.
El estudio de Turner examinó el resveratrol, un compuesto encontrado en las uvas rojas y el vino tinto, para ver si puede cambiar los niveles de glucosa en pacientes con insuficiencia renal leve a moderada con enfermedad de Alzheimer (EA). Turner dice que se cree el resveratrol actúa sobre las proteínas en el cerebro de una manera que imita los efectos de una dieta baja en calorías.
"Sabemos por estudios en animales que la restricción calórica previene enfermedades del envejecimiento como la diabetes y la enfermedad de Alzheimer", explica Turner, director del Programa de Trastornos de la Memoria del Centro Médico de la Universidad de Georgetown. "En la otra cara de la moneda, la diabetes aumenta el riesgo de desarrollar Alzheimer, así que, tal vez, mediante la mejora de la tolerancia a la glucosa podamos prevenir o retrasar la diabetes y la enfermedad de Alzheimer".
A los participantes se les hizo por primera vez una prueba de tolerancia a la glucosa en ayunas para obtener un nivel básico y luego se les reexaminó dos horas después de comer. Durante la digestión, el nivel de azúcar en la sangre aumenta, aunque el páncreas produce insulina para bajarlo, por lo que un nivel alto de azúcar después de dos horas revela intolerancia a la glucosa (prediabetes) o diabetes si el nivel es muy alto.
"El número de personas con intolerancia a la glucosa (prediabetes) fue mucho mayor de lo esperado --afirma Turner--. Me sorprendió la cantidad de gente que no sabía que era prediabética, a pesar de que estas personas ya reciben la mejor atención médica".
Cinco (un 4 por ciento) de los 128 participantes tenían deteriorados los niveles de glucosa en ayunas, mientras que otros tres (2 por ciento) registraban resultados compatibles con diabetes mellitus tipo 2. De los 125 sujetos que completaron la prueba de dos horas, 38 (30 por ciento) demostraron intolerancia a la glucosa, mientras que 16 (13 por ciento) mostraron resultados coherentes con diabetes. Por lo tanto, la prevalencia global de intolerancia a la glucosa o diabetes, a las dos horas, fue del 43 por ciento o casi la mitad de las personas en el estudio.
Turner subraya que mientras los neurólogos no suelen mandar la realización de una prueba de tolerancia a la glucosa este resultado sugiere que tal vez se debería analizar en todos los pacientes con Alzheimer temprano. "Es un estudio sencillo y económico que revela información crítica de la salud", afirmó el pricipal investigador, quien explicará sus hallazgos en el Congreso de la Asociación Internacional de Alzheimer que se celebra este domingo, 14 de julio.
Fuente: Europapress.es