Una compañía biotecnológica australiana, Actinogen Medical, está comenzando un ensayo clínico de fase II para probar si un fármaco que disminuye los niveles de cortisol, la llamada hormona del estrés, es capaz de enlentecer el ritmo de deterioro en las personas con enfermedad de Alzheimer.
Después de varios fracasos en la búsqueda de tratamientos farmacológicos efectivos, las expectativas se han modulado, al punto que pocos se atreven a hablar de una cura.
Ahora mismo la esperanza está puesta en la prevención y en encontrar dianas (mecanismo a los que dirigir fármacos) que permitan enlentecer el ritmo al que un enfermo va perdiendo habilidades y capacidades.
Citado por el periódico especializado Financial Review, el Dr Bill Ketelbey, CEO de Actinogen Medical, expresó:
El alzhéimer es una de esas enfermedades en las que hay que hacer múltiples disparos en las dianas, debemos seguir atacándola desde todas las direcciones porque es muy poco probable que la enfermedad tenga una única terapia definitiva”
Y añadió:
En lugar de una bala mágica, probablemente va a haber una combinación de terapias.
Y su bala contra el alzhéimer es Xanamem.
La marca comercial del fármaco que ha desarrollado esta compañía australiana es Xanamem, un compuesto que estudios previos, realizados en personas sanas, muestran que es seguro, bien tolerado y logra disminuir los niveles de cortisol.
¿Y por qué es importante disminuir los niveles de cortisol ? Pues porque varias investigaciones han encontrado que mientras mayores son los niveles de esta hormona, mayor es el deterioro intelectual de la persona.
Incluso un estudio vinculó los niveles de cortisol en plasma con la concentración en el cerebro de una proteína vinculada al origen de la enfermedad de Alzheimer.
Con estos antecedentes, y tal como está actualmente de sediento el campo del alzhéimer, no es de extrañar que Xanamem pase a fase II de ensayo clínico.
El nuevo ensayo clínico con Xanamem para la enfermedad de Alzheimer.
El ensayo clínico que comienza es de fase II y pretende reclutar a un total de 174 personas con demencia debido a enfermedad de Alzheimer en fase leve. Se realizará en lugares de EE.UU, Reino Unido y Australia.
La intervención tendrá una duración total de 12 semanas, durante las cuales un grupo tomará Xanamem, mientras otros enfermos solo un compuesto placebo sin efecto real sobre la enfermedad.
La dosis inicial será de 10 mg por día, aunque se tiene planificado escalar la dosis hasta 30 mg diarios.
¿Será Xanamem un freno efectivo contra el alzhéimer? Como siempre que se habla de esta enfermedad, la respuesta se hace esperar.
Fuente: 2ti.es