Cesta de la compra

{{#if has_items}}
{{#each line_items}}
{{ full_title }}
{{ quantity }}
{{{ subtotal_human }}}
{{/each}}
Subtotal {{{ subtotal_human }}}
{{#if coupon_name}}
Cupón de descuento {{ coupon_name }} - {{{ coupon_discount_human }}} x
{{/if}} {{#if donation}}
Donación {{{ donation_human }}}
{{/if}}
{{#if shipping_handling_left_for_free}}
(Te quedan {{{ shipping_handling_left_for_free }}} para que el envío sea gratis)
{{/if}}
{{#if tx_okstock}} Envíos en 72h. {{/if}} {{#if delivery_date}} El pedido te llegará el {{ delivery_date_human }} {{/if}}
Total {{{ total_ceafa }}}
{{else}}
Actualmente no tienes nada en la cesta de la compra. Ir a la tienda.
{{/if}}

El alzhéimer desborda a las familias, que piden usar el hospital San José

El centro de día y la unidad de Frigsa de Afalu están al tope de capacidad

La Asociación de Familiares de Enfermos de Alzhéimer e outras demencias de Lugo (Afalu) está desbordada, ya que el número de personas que solicitan entrar en alguno de los dos talleres de estimulación que atiende el colectivo crece sin parar. En este momento, tanto el centro de día de alzhéimer, situado en la calle Juana la Loca, como la unidad de la Casa Clara Campoamor están al máximo de su capacidad, según relata la presidenta de Afalu, Carmen Pena Ledo. «Temos lista de espera nos dous sitios. Se tivesemos un local máis grande poderiamos dar un servizo moito maior porque hai moitísima demanda e nós non temos espazo», afirma. Entre los dos dispositivos, Afalu asiste a unos sesenta enfermos: 40 en el centro de día de la Xunta y 20 en la unidad del parque de Frigsa.

A ello se suma Párkinson Lugo. La asociación nació al amparo de Afalu hace algo más de un año, pero en este tiempo ha crecido mucho. No tiene local propio todavía, por lo que comparte el espacio de la Casa Clara Campoamor con el colectivo de alzhéimer. «Alí atende a 14 usuarios. Non podemos coller máis porque non hai espazo», lamenta la activista, que indica que un técnico del colectivo, un fisioterapeuta, se está desplazando a domicilios particulares para atender a enfermos que no tienen plaza. «Hai moita xente enferma, e cando a asociación empezou a moverse empezaron a querer ir», señala el director del centro de Juana la Loca, Valentín Calvín.

 

Quedará vacío en meses

Con este panorama demandan que les cedan «unha parte» del antiguo hospital San José, que en unos meses quedará totalmente vacío. La mayoría de sus servicios ya han sido transferidos, y únicamente quedan en él la unidad de detección precoz del cáncer de mama, que depende de la Consellería de Sanidade, y la unidad Infanto-Xuvenil y el Hospital de Día, dependientes del Sergas. La imagen de abandono comienza a adueñarse del entorno del viejo centro hospitalario. «Cústalles máis telo pechado que usándoo, porque o mantemento téñeno que facer igual [...] En vez de facer un xeriátrico novo, pedimos que nolo cedan en parte, só queremos o espazo».

Fuente:  www.lavozdegalicia.es

Con la colaboración de