Un equipo de científicos de la Universidad Estatal de Ohio, Estados Unidos, ha visto evidencia de que el cerebro registra la hora y el lugar de los recuerdos de la vida real, como revela un artículo sobre su trabajo publicado en 'Proceedings of the National Academy of Sciences'.
Los participantes en el estudio llevaron un teléfono inteligente con una aplicación que hizo fotos al azar durante un mes. Posteriormente, cuando estos revivieron recuerdos relacionados con esas imágenes en un escáner de resonancia magnética funcional (fMRI), los investigadores vieron que una parte del hipocampo del cerebro almacena la información sobre dónde y cuándo ocurrieron sus recuerdos específicos.
La investigación muestra que cuanto más separados en el espacio y en el tiempo sucedieron los recuerdos, más distantes aparecieron las representaciones de los recuerdos en el hipocampo. "Lo que estamos recogiendo aquí no es todo el recuerdo, sino la esencia básica: el lugar y el momento de la experiencia", detalla el autor principal del estudio, Per Sederberg, profesor asistente de Psicología en la Universidad de Ohio.
"Esto podría ser visto como el centro de la memoria, en el que tenemos estas representaciones, a gran escala, en general, de nuestras experiencias", añade. Un trabajo similar hecho en ratas que identificó las neuronas de rata que codifican el espacio ganó el Premio Nobel de Medicina del año pasado, pero en estos animales el espacio en el que viven es muy reducido.
También ha habido estudios en humanos en los que se pide a los participantes que recuerden listas de palabras u otra información que acaban de ver, pero registran recuerdos de tan sólo unos minutos que se crean bajo condiciones experimentales. Este estudio amplía en gran medida estas dos dimensiones, al ver recuerdos de la vida real en los seres humanos.
"Hemos encontrado que el hipocampo representa el tiempo y el espacio para al menos un mes de recuerdos que abarcan hasta 30 kilómetros en el espacio", detalla Sederberg. "Es la primera vez que somos capaces de estudiar los recuerdos en la escala de nuestras vidas", subraya este experto.
El estudio involucró a nueve mujeres de 19 a 26 años, que llevaron un teléfono inteligente basado en Android con una correa alrededor de su cuello durante un mes. El teléfono estaba equipado con una aplicación 'lifeblogging' diseñada a medida por Dennis que hacía fotos en momentos aleatorios del día, registrando la hora, el lugar, si la persona se movía y otra información.
En el transcurso del mes, el teléfono tenía un promedio de alrededor de 5.400 fotos en el caso de cada participante. Tras finalizar el mes, se puso a los participantes en un escáner de resonancia magnética funcional que midió la actividad en su cerebro mientras se les mostraban 120 de sus propias fotos y se pidió a los participantes que trataran de recordar el evento representado en cada imagen y revivieran la experiencia en su mente mientras visualizaban la foto durante ocho segundos.
El hipocampo, el primer afectado en el alzheimer
Los resultados mostraron que los patrones de actividad en el hipocampo anterior izquierdo eran más diferentes para los recuerdos de eventos que sucedieron más separados en el tiempo y el espacio. "Si los participantes no recordaban las imágenes, no vimos esta relación -afirma Sederberg-. Tampoco conseguimos este efecto si sólo preguntamos sobre el tiempo y no el lugar del recuerdo. Vimos que el tiempo y el espacio están muy entrelazados en nuestras representaciones de los recuerdos".
Sederberg explica que las representaciones que se encuentran en la parte anterior izquierda del hipocampo no son la totalidad de los recuerdos, sino sólo el panorama de dónde y cuándo ocurrió. Otras investigaciones sugieren que la parte posterior del hipocampo puede "afinar" el tiempo y el lugar.
Este experto recuerda que el hipocampo es una de las primeras áreas del cerebro que se degrada en la enfermedad de Alzheimer. "Las personas con Alzheimer pueden olvidar las experiencias y las personas porque no son capaces de controlar con eficacia sus viejos recuerdos. Ellos no pueden recuperar los recuerdos porque no pueden obtener la señal general correcta para llegar a ese recuerdo", subraya.
Fuente: larioja.com