En los últimos años los casos de Alzheimer han aumentado considerablemente. Según la OMS en el mundo entero hay unos 47,5 millones de personas que padecen demencia, y cada año se registran 7,7 millones de nuevos casos. La enfermedad de Alzheimer, que es la causa de demencia más común, acapara entre un 60% y un 70% de los casos.
El riesgo de contraerlo sube y baja, según la dieta que sigue el individuo. Por ejemplo, si nuestra dieta incluye mucha carne, dulces y productos lácteos altos en grasa, podríamos tener más probabilidad de contraer esta enfermedad.
Según recuerda un artículo de revisión de literatura médica al respecto, publicado en la revista del American College of Nutrition, por ejemplo, cuando Japón hizo la transición nutricional de la dieta tradicional japonesa a la dieta occidental, las tasas de enfermedad de Alzheimer aumentó de 1% en 1985 al 7% en 2008.
La evidencia de estos factores de riesgo, que provienen de los estudios ecológicos y observacionales, también muestra que las frutas, verduras, granos, productos lácteos bajos en grasa, legumbres y pescado se asocian con un menor riesgo.
Además de la revisión de la literatura de revistas, un nuevo estudio ecológico se llevó a cabo utilizando la prevalencia de la enfermedad de Alzheimer de 10 países (Brasil, Chile, Cuba, Egipto, India, Mongolia, Nigeria, República de Corea, Sri Lanka y Estados Unidos) junto con datos de la dieta seguida 5, 10 y 15 años antes de los datos de prevalencia. Este estudio constató que la ingesta habitual de carne o productos animales (menos leche) 5 años antes de prevalencia de la enfermedad de Alzheimer tenía mayor correlación con la prevalencia de la enfermedad.
El estudio también examinó el riesgo específico de desarrollar la enfermedad de Alzheimer al que se enfrenta cada país y región en función de sus hábitos dietéticos asociados. En este caso los ciudadanos de los Estados Unidos son los que más peligro corren a causa de su dieta que incluye gran cantidad de carne. Estos tienen aproximadamente un 4% más de probabilidades de desarrollar Alzheimer.
El autor del trabajo, William B. Grant, afirma que “la reducción del consumo de carne podría reducir significativamente el riesgo de padecer Alzheimer, así como varios tipos de cáncer, diabetes tipo 2, derrame cerebral y, probablemente, la enfermedad renal crónica”.
A su juicio, “la creciente evidencia en todos los estudios indica que el patrón de dieta occidental -sobre todo la gran cantidad de carne que incorpora- está fuertemente asociada con el riesgo de desarrollar enfermedad de Alzheimer y otras enfermedades crónicas. A pesar de que la tradicional dieta mediterránea se asocia con aproximadamente la mitad del riesgo que la dieta occidental, las dietas tradicionales de países como India, Japón y Nigeria, con muy bajo consumo de carne, se asocian con una reducción adicional del 50% en el riesgo de la enfermedad de Alzheimer”.
Fuente: lavanguardia.com