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El drama de vivir en el olvido

En el Día Mundial del Alzhéimer, celebrado ayer, José Fontenla, presidente de la Afapo, y María José Magdaleno, ex presidenta, cuentan su experiencia personal con esta dolencia

En Galicia conviven con el Alzhéimer unas 50.000 personas entre quienes sufren la enfermedad y sus cuidadores, que en un 98% son sus propios familiares. Además, cada año se descubren 5.000 nuevos casos. Aproximadamente 300 asociaciones  representadas por la Confederación Española de Familiares de Enfermos de Alzhéimer y otras Demencias luchan por mejorar la calidad de vida de los enfermos.

Una de ellas es Afapo, que mientras recaudaba fondos y explicaba la enfermedad en la Plaza de la Peregrina ayer, su presidente y su ex presidenta contaban su relación familiar con el Alzhéimer.

La Asociación de Familiares de Enfermos de Alzhéimer y Otras Demencias de Pontevedra (AFAPO) instaló ayer en la plaza de la Peregrina mesas informativas para recaudar fondos y repartir información de una enfermedad de la que se desconoce su causa exacta y,hoy por hoy,no se dispone de un tratamiento eficaz para una dolencia de la que absolutamente nadie está exento de padecerla.El acto se celebraba con motivo del Día Mundial del Alzhéimer.

José Manuel Fontenla, presidente de AFAPO vivió en primera persona esta enfermedad por partida doble,“primero fue mi tía hace 15 años, que sufrió un proceso degenerativo importante, sus últimos 10 años en vida los pasó postrada en la cama, falleció hace 2 años.Y ahora es mi madre,que descubrimos su enfermedad hace 4 años.Todo comenzó con los primeros síntomas,no sabía el día en que vivía,tampoco conocía cuál era su casa y tenía otra de las cuestiones características: la dificultad en el manejo del dinero.Ahora es dependiente”, explica.

La ex presidenta de la AFAPO, María José Magdaleno, también tuvo que pasar por este duro trance ya que,a raíz del primer aniversario de lamuerte de su padre,su madre empezó a tener conductas extrañas.

Ella y sus cuatro hermanos pensaron que esas conductas eran debidas al fallecimiento del cabeza de familia pero“empezaba a comprar mucha cantidad de comida,otras veces tenía un trastorno de la conducta,a veces estabamuy triste y otras veces muy contenta”.

Cuenta María José Magdaleno que transcurrido un año fueron al médico y “nadie sabía decirnos exactamente qué le pasaba o nos decían que todo era fruto deuna depresión”. Al final,gracias a la Asociación del Alzhéimer que les recomendó al médico Miguel Gallego“pudimos llegar al diagnóstico y a la conclusión que lo que le pasaba a mi madre era la enfermedad del Alzhéimer”.

Es una dolencia dura para los familiares y arbitraria para quién la adquiere,“es una lotería,mi madre, por ejemplo,iba a buscar pan y regresaba a casa sin él porque se había olvidado. Las amigas nos decían que estaba rara, nos repetía una misma cosa muchas veces”, dice.“Ella era joven cuando tuvo la enfermedad, con 66 años,cuando te pasa esto siendo joven, la enfermedad avanza más rápidamente.

Lo más grave sucedió hace 4 años cuando ya no reconocía a ninguno de sus 4 hijos.Entonces, mi familia se unió y ahora  cada semana un hermano está con ella”,relata.

La Asociación de Familiares de Enfermos de Alzhéimer, que alberga unamedia de 40 personas, tiene como uno de sus objetivos prioritarios un centro de día para poder doblegar su capacidad.

Esta asociación lo que pretende es enseñar a las familias como ayudar a los enfermos y crea un respiro para los que tienen que convivir con estas personas,ya que se ocupan de los enfermos de Alzhéimer unas 3 ó 4 horas al día.En Galicia se detectan unos 5.000 nuevos casos de demencia cada año. José Fontenla, presidente de la Afapo considera que“los enfermos deben hacer vida social,deporte, ejercicios mentales,aunque hay que enseñar a la familia ya que los enfermos no saben lo que hacen”.

Afapo tiene diferentes trabajadores entre los que se encuentran un sicólogo,un asistente social,una fisioterapeuta y un musicólogo con la finalidad de ayudar al enfermo, y asistir de forma psicológica y moral a las familias afectadas.

Esta enfermedad también representa más del 60% de todos los casos analizados dentro de la demencia. Se calcula que en la actualidad hay 36 millones de personas aquejadas por el Alzhéimer en todo el mundo. Con respecto a la cura, los especialistas consideran que de no encontrarse una efectiva, esta cifra podría alcanzar los 115 millones de personas en el año 2050.

Diagnóstico precoz

Todas las asociaciones de Alzhéimer entre ellas la Afapo, recomiendan que cuanto antes se detecten los síntomas, mejor. La pérdida de memoria o el trastorno de la conducta pueden indicar un posible problema de Alzhéimer y el momento para acudir al médico de cabecera para que, si lo considera necesario, remitir al enfermo a un neurólogo que será quien determine el tipo de demencia.

Fuente: spypress.com

 

Con la colaboración de