Los voluntarios, hombres y mujeres de todas las edades que regalan sus ilusiones, esfuerzos, tiempo y trabajo en aras de ayudar a los demás, son el motor que impulsa la fuerte acción que caracteriza al potente movimiento social salmantino. En aras de hacer más visible la labor de los colectivos que trabajan en el ámbito del voluntariado, ayer se planteó una tarde divertida y amena en la plaza de los bandos en torno a la segunda edición del encuentro ‘Salamanca nos movemos’.
Esta cita se plantea por segunda vez con un éxito que duplicó la aceptación de la primera edición, ya que el pasado año se dieron cita en la misma 14 asociaciones. Este año han sido 23, las agrupaciones de diferentes ámbitos que se han sumado a esta cita coordinada por la Agencia Municipal del Voluntariado del Ayuntamiento de Salamanca.
María José Fresnadillo, concejala de Salud Pública y Consumo y los concejales de la oposición Maribel Campo y Enrique Cabero, todos ellos en funciones, se pasaron por este encuentro y se interesaron por las diversas entidades presentes. Agrupaciones de diferentes ámbitos de intervención como la salud y ayuda mutua, cultura, inmigración, ámbito comunitario, mayores, infancia y juventud. Pues tal como explicó Miguel Ángel García, técnico de la Agencia del Voluntariado, quisieron que esta fuera, «una actividad abierta donde cada asociación saque el partido a su manera, bien mediante mesas informativas o con alguna actuación».
Durante toda la tarde se llevó a cabo el típico Mercadillo del Trueque del Banco de Tiempo de Salamanca. Hubo talleres organizados por Msc Scout, exhibición de baile a cargo del grupo de Grease de Aviva y diversas exhibiciones de baile actual ofrecidas por Satchmo-Fux-Dance. También hubo una muestra a cargo de la asociación de Perros de Asistencia y Animales de Terapia. En esta entidad sin ánimo de lucro preparan a perros para la ayuda y la asistencia, por ejemplo a niños con autismo, a personas con alguna discapacidad e incluso para terapias en centros geriátricos de personas con enfermedad de Alzheimer.
La temporalidad del voluntariado es una circunstancia que origina que «en verano se produja un bajón importante», resalta García. Esta circunstancia se produce porque muchos de los voluntarios estudiantes y no estudiantes aprovechan el verano para pasarlo en los pueblos u otras localidades. Un estudio publicado recientemente muestra el perfil de voluntarios, del que Miguel Ángel García destaca que «hay un número de mujeres voluntarias superior al de hombres». Además subraya que, «hay un porcentaje elevado de personas mayores de 65 años».
Entre los requisitos para ser voluntario, este técnico de la Agencia Municipal del Voluntariado recuerda que quien afronta este reto se le pide, «responsabilidad y que desarrolle la acción oportuna acorde a la actividad o a los destinatarios de la misma». Desde esta agencia se encargan de informar y dar visibilidad a lo que es el voluntariado.
Hay muchos ejemplos de voluntariado, uno de ellos es el de Carmencita Ferreira, a quien sus 75 años no le frenan el acudir cada día al hospital a donde va como voluntaria de la Asociación contra la leucemia y enfermedades de la sangre. Allí se encarga de aportar a los familiares y enfermos su cercanía y ayuda. «Les llevo un café y les atiendo», entre otras cosas recuerda esta mujer que se ha ganado el cariño de todas las personas que la conocen y el aprecio de todas las personas del hospital que la animan a seguir con esta labor por el gran aporte que proporciona.
Para cerrar este encuentro cargado de propuestas, que sobre todo invitaban a la ciudadanía a acercarse a la enriquecedora experiencia del voluntariado, la Federación de Asociaciones de Mayores de Salamanca representó una obra de teatro.
Fuente: elnortedecastilla.es