El código de barras, omnipresente en todos los productos que compramos, fue inventado por un estudiante de Filadelfia a mediados del siglo pasado, aunque le costó veinte años que las empresas lo implantaran. La innovación ha proporcionado grandes adelantos a nuestra vida y a nuestras empresas, pero nunca es fácil que esas ideas consigan arrancar, como le ocurrió a Normal Woodland y su código de barras. Para poner en contacto a los emprendedores con posibles inversores que hagan realidad esas ideas innovadoras desde hace tres años se celebra 'The South Summit', una competición de 'start-ups' y una vía de desarrollo para las ideas, organizada por Spain Startup, IE Business School y Comunica +A. Este año compiten 100 'start-ups' -seleccionadas de un total de 3.000 presentadas- de España, Latinoamérica, sur de Europa e Israel. En esta búsqueda de su 'business angel' (persona física o jurídica que aporta dinero, experiencia o contactos a emprendedores con nuevas iniciativas empresariales) unos 3.500 emprendedores podrán contactar con más de 400 inversores en este encuentro que se celebrará del 8 al 10 de octubre en Madrid.
Entre las cien 'start-ups' seleccionadas hay ideas de todo tipo, pero llama la atención el gran número de las que se proponen avances en el área de la salud. Alzhup.com es un servicio sociosanitario creado para la lucha contra la enfermedad de Alzheimer. La compañía procede de Aragón y ofrece a los pacientes y profesionales una plataforma con diferentes terapias. Microhealth.org permite a los pacientes con problemas de hemofilia u otras coagulopatías congénitas monitorizar el progreso del tratamiento y compartir conclusiones clínicas. Oblumi.com es una aplicación que permite medir la temperatura con el móvil y suministra la dosis correcta de medicamento.También compiten Cellulis. com, una empresa cántabra que desarrolla nuevas tecnologías de criopreservación, y Tedcas.com, compañía navarra que permite el acceso y manejo de la información médica en entornos sanitarios que precisan condiciones de asepsia a través de interfaces basadas en dispositivos optoelectrónicos sin necesidad de contacto, con lo que se previenen las infecciones.
Por supuesto, entre las finalistas también las hay dedicadas a la energía, biotecnología, High Tech, B2B o B2C.
Fuente: larioja.com