El Alzheimer es "una auténtica plaga" que afecta a unas 800.000 personas en España pero cuyas consecuencias padecen de forma directa o indirecta cerca de 3,5 millones, por lo que frenarla supone "uno de los desafíos más importantes" de la sociedad actual.
Así ha definido esta enfermedad y las necesidades sociales que acarrea, en declaraciones a EFE, Arsenio Hueros, presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Personas con Alzheimer y otras Demencias (CEAFA), una de las entidades organizadoras del V Congreso Nacional sobre esta dolencia que se celebrará a partir del próximo jueves en San Sebastián.
La sociedades españolas de Geriatría y Gerontología (SEGG) y de Neurología (SEN) organizan junto a la CEAFA este simposio, que durante tres días reunirá en el Palacio Kursaal donostiarra a más de 600 expertos, entre médicos especialistas en neurología o geriatría, psicólogos, profesionales de la asistencia social o representantes institucionales y del movimiento asociativo.
"Esfuerzo compartido" es el lema elegido para esta quinta edición del congreso, que refleja, según ha explicado Hueros, el clamor de todas las personas que sufren, de una u otra forma, el mal de Alzheimer y que demandan que "se adopten medidas ya", que involucren a distintos niveles y ámbitos de las administraciones públicas, a modo de "Política de Estado" dirigida a enfrentar esta dolencia.
Para definirla como "plaga", el presidente de la entidad que agrupa a las federaciones y asociaciones de enfermos y familiares en España se ha basado en las estadísticas de incidencia, que a día de hoy cifran el total de enfermos en unos 800.000, lo que equivale al 1,4 ó 1,5% de la población, pero que "hay que multiplicar por cuatro" a la hora de cuantificar a los españoles que conviven con el Alzheimer.
Según las previsiones médicas y demográficas, ha agregado Hueros, el índice de prevalencia del Alzheimer irá en aumento hasta duplicarse en 2020 y triplicarse en 2050, lo que la convierte en un problema social y de salud "de grandes proporciones".
"Nadie está libre del Alzheimer y, aunque resulte muy triste decirlo, es como una lotería que toca a unos y a otros no", ha comentado Arsenio Hueros, quien ha insistido en que esta enfermedad puede igualmente considerarse "una espada de Damocles, individual pero también social".
De ahí que su afrontamiento no pueda "quedarse en el ruido" que hacen las asociaciones de familiares porque "es un problema que hay que atajar con muchos esfuerzos en todos los ámbitos".
Ha asegurado que las terapias no farmacológicas que realizan fundamentalmente las distintas asociaciones "están dando unos resultados extraordinarios para mejorar la calidad de vida tanto de los enfermos como de sus familiares".
No obstante, su "esperanza" reside en encontrar, si no la curación, la forma de prevenir, paliar y sobre todo convertir el mal de Alzheimer en una enfermedad crónica, que manera que médicamente se logre detener su evolución.
Fuente: abc.es
Por tanto, además de un llamamiento a la clase médica y a los investigadores para que potencien sus esfuerzos, Hueros ha hecho un llamamiento a la Administración para que "no deje desamparados" a enfermos y familiares, y encare la problemática médica y social que acarrea esta dolencia desde todos sus frentes.
