Después de 11 años en París, este suizo (Basilea, 1960) reconoce que él y su familia tienen mejor calidad de vida en la Ciudad Condal. Sol, buen tiempo, y un ambiente científico internacional en el que tanto Ivo Gut como su mujer se encuentran a gusto. El director del Centro Nacional de Análisis Genómico (CNAG ) de Barcelona charla con EL MUNDO pocos días después del último anuncio de Craig Venter, que ha vuelto a poner la genómica de plena actualidad. En este centro barcelonés se secuencian cientos de genomas al año para diversos proyectos científicos, y aunque la crisis también les ha tocado, Gut admite que ha podido seguir creciendo.
¿Qué le parece el anuncio de Venter de que secuenciará 40.000 genomas al año?
¿Qué le parece el anuncio de Venter de que secuenciará 40.000 genomas al año?
Es bueno ver que alguien invierte esa cantidad de dinero en este área. Es una idea muy obvia, si usted mira en nuestro centro, muchos de los proyectos van en esa dirección, no es una propuesta completamente inusual. Hacer algo así de una manera sistemática es bueno.
Quizás la importancia viene por la magnitud de las cifras que maneja el 'padre del genoma humano'...
Digamoslo así, él compra un test capaz de secuenciar 18.000 genomas al año. Ha comprado dos, puede hacer por tanto 36.000 genomas anuales. Nosotros estamos buscando la financiación para buscar un test similar, aunque nuestra aplicación sería un poco diferente, buscamos soluciones a problemas médicos.
¿Qué capacidad tiene el CNAG [un centro mixto de la Generalitat y el Gobierno central]?
Nosotros podemos secuenciar 7-8 genomas al día, pero con la tecnología que vamos a adquirir podríamos llegar a 3.000 al año, alrededor del 10% de lo que Venter va a hacer. Éste de Barcelona es el centro de secuenciación más grande del sur de Europa, hay uno en el Reino Unido más grande (el Instituto Sanger), y luego hay varios centros europeos similares en Alemania, Dinamarca y Francia.
¿En qué proyectos están participando?
Tenemos proyectos de ciencia básica, y otros más traslacionales. Si mira la actividad del centro, el campo en el que tenemos más proyectos tiene que ver con el cáncer, que supone aproximadamente la mitad de nuestra actividad, pero también tenemos proyectos de agricultura, de enfermedades raras, infecciosas...
Tenemos proyectos de ciencia básica, y otros más traslacionales. Si mira la actividad del centro, el campo en el que tenemos más proyectos tiene que ver con el cáncer, que supone aproximadamente la mitad de nuestra actividad, pero también tenemos proyectos de agricultura, de enfermedades raras, infecciosas...
¿Hay enfermedades en las que la genómica es más determinante que en otras?
Absolutamente. Puedes aprender mucho de casi cualquier enfermedad a través de la genómica, pero definitivamente donde puedes traducir esa información de forma inmediata es el cáncer y las patologías raras. Ahí es muy fácil aprender más, dar con soluciones farmacológicas; también en las enfermedades infecciosas. Aquí hemos secuenciado por ejemplo 300 cepas diferentes de hongos, algunos de ellos muy tóxicos, algunos necesarios en nuestro colon...
Una de las cuestiones que despertó el anuncio de Venter es quién y cómo va a proteger toda esa información de los pacientes.
Absolutamente. Puedes aprender mucho de casi cualquier enfermedad a través de la genómica, pero definitivamente donde puedes traducir esa información de forma inmediata es el cáncer y las patologías raras. Ahí es muy fácil aprender más, dar con soluciones farmacológicas; también en las enfermedades infecciosas. Aquí hemos secuenciado por ejemplo 300 cepas diferentes de hongos, algunos de ellos muy tóxicos, algunos necesarios en nuestro colon...
Una de las cuestiones que despertó el anuncio de Venter es quién y cómo va a proteger toda esa información de los pacientes.
En nuestro centro tenemos diferentes niveles de protección. A nivel de investigación, para acceder a la información hay una serie de filtros y los científicos tienen que firmar ciertos acuerdos de confidencialidad. Respecto a la información clínica también está protegida exactamente de la misma manera. Los datos de los pacientes, a medida que tenemos más y más información clínica junto a los datos genómicos, son muy importantes también para la investigación. Esto ha provocado la creación de una alianza global para la protección de la información genómica (GAGH). Es una alianza internacional para establecer un marco seguro y ver cómo compartimos la información con seguridad. Desde luego, no compartir la información genómica es malo para todos, porque no avanzaríamos, pero tenemos que encontrar los mecanismos para hacerlo de manera segura.
En un marco legal, suficientemente protector con la información de los individuos, pero que nos permita seguir investigando.
¿Y quién va a explicarle su ADN al paciente? ¿Es ético, por ejemplo, decirle que va a tener una enfermedad para la que no existe tratamiento?
Hay pocas enfermedades que, leyendo el genoma, te den ese tipo de certeza. Hay pocas cosas en el genoma que te digan que te va a pasar algo con una certeza del 100%. Pero éste es un concepto difícil de traducir para la gente. Si te haces un test genético, por ejemplo, te puede decir que tienes un aumento del 50% del riesgo de sufrir Alzheimer. Eso puede parecer mucho, pero si lo incluyes en una población de 100 personas, eso significa que tu riesgo pasa de 1 a 1,5. Eso a nivel poblacional es muy importante, porque cuando coges a un millón de individuos, eso es un número muy elevado. Pero a nivel individual, el test no dice quién va a tener Alzheimer, si voy a ser yo o el de al lado. La genómica no es determinista. Sólo indica que mi riesgo está elevado. Incluso si hablamos de un riesgo cinco veces más elevado, no es algo definitivo. Es un riesgo alto, uno de cada 20, pero no es algo seguro, y esto es algo difícil de entender para la población.
¿Usted se ha secuenciado su genoma?
No, todavía no. Aunque en realidad yo ya he superado la edad en la que esa información podría tener utilidad. Es demasiado tarde para mí.
Llegó a España en 2010, ¿cómo ha vivido la crisis y los recortes en ciencia en estos últimos años?
No, todavía no. Aunque en realidad yo ya he superado la edad en la que esa información podría tener utilidad. Es demasiado tarde para mí.
Llegó a España en 2010, ¿cómo ha vivido la crisis y los recortes en ciencia en estos últimos años?
Nosotros también nos hemos visto afectados, porque el gobierno [la financiación del CNAG es mixta entre la Generalitat y el Gobierno central] nos ha dado menos dinero del que nos prometió. Pero hemos tenido éxito, lo hemos hecho bien, porque somos un centro muy bien organizado, tenemos muchos proyectos internacionales de todo tipo. Así que hemos crecido incluso aunque la financiación pública no ha sido la esperada. La crisis no nos ha afectado dramáticamente.
¿Cuáles cree que son los principales problemas de la ciencia en España? ¿Le ve solución?
Ésa es una pregunta muy compleja. No sé la respuesta. Creo que hay que entender la ciencia, es un fenotipo muy particular. Los científicos están en esto porque creen en lo que hacen, si quisiesen ganar mucho dinero no estarían aquí. Tienen buenos cerebros, hay algo ideológico en lo que hacen, porque lo hacen por la sociedad. Aquí no hay nadie que se vaya a las cinco porque es su horario, eso no existe, no piensan así. Ahora los fondos no son lo mismo, hay mucha gente con preguntas interesantes, pero las respuestas llegan más lentas porque no tienen acceso a la misma financiación. Lo que da miedo es que el dinero que se invierte en ciencia, y España en eso no es una excepción, es muy pequeño. La gente gasta más al año en comprarse móviles que en investigación, porque no se entiende el valor final de la ciencia. Si tú estás en un hospital, pagarías lo que fuera por curarte, la gente espera milagros, y no se da cuenta de que eso también es investigación.
Muchos científicos españoles están saliendo, y usted en cambio está aquí, cuando quizás podría ganer más dinero en su país o en otros países europeos. ¿Qué ha encontrado aquí?
Muchos científicos españoles están saliendo, y usted en cambio está aquí, cuando quizás podría ganer más dinero en su país o en otros países europeos. ¿Qué ha encontrado aquí?
Barcelona tiene grandes cosas. Tiene muy buenos hospitales en los que se hace investigación, con excelentes clínicos. Hay centros importantes de investigación básica y se tiene muy en cuenta la bioinformática, con el centro de supercomputación, otros países no son tan buenos en esto. Estamos un poco constreñidos, con más fondos sería más fácil, pero no me quejo. No puedo hablar de toda España porque no la conozco, pero en Barcelona hay buenas redes de colaboración y una importante masa crítica.
Seguro que por su puesto tiene que 'lidiar' también con los políticos, ¿qué opinión le merecen?
Seguro que por su puesto tiene que 'lidiar' también con los políticos, ¿qué opinión le merecen?
Los políticos con los que trato apoyan mucho nuestro proyecto. Saben que la genómica va a tener un gran crecimiento en el futuro a nivel mundial, mire el anuncio de Venter. La genómica va a tener una gran importancia en la vida de todos nosotros. Va a estar en los hospitales.
Fuente: elmundo.es