Cesta de la compra

{{#if has_items}}
{{#each line_items}}
{{ full_title }}
{{ quantity }}
{{{ subtotal_human }}}
{{/each}}
Subtotal {{{ subtotal_human }}}
{{#if coupon_name}}
Cupón de descuento {{ coupon_name }} - {{{ coupon_discount_human }}} x
{{/if}} {{#if donation}}
Donación {{{ donation_human }}}
{{/if}}
{{#if shipping_handling_left_for_free}}
(Te quedan {{{ shipping_handling_left_for_free }}} para que el envío sea gratis)
{{/if}}
{{#if tx_okstock}} Envíos en 72h. {{/if}} {{#if delivery_date}} El pedido te llegará el {{ delivery_date_human }} {{/if}}
Total {{{ total_ceafa }}}
{{else}}
Actualmente no tienes nada en la cesta de la compra. Ir a la tienda.
{{/if}}

Humanina, la “superproteina” que nos mantiene sanos y nos hace vivir más

Investigadores estadounidenses han sido los primeros en demostrar que la humanina, una proteína diminuta, tiene un impacto enorme en la salud y la longevidad tanto en animales como en humanos.

Científicos de la Universidad del Sur de California (Estados Unidos) han descubierto nuevas peculiaridades de la humanina, un péptido codificado en el pequeño genoma de las mitocondrias, las "centrales eléctricas" de las células. Así, niveles más altos de humanina en el cuerpo están conectados con una mayor duración de la vida, una mejor salud y un menor riesgo de enfermedades como el Alzheimer.

"Se sabe desde hace tiempo que la humanina ayuda a prevenir muchas enfermedades relacionadas con la edad, pero esta es la primera vez que se ha demostrado que también puede aumentar la esperanza de vida", explica el autor principal, Pinchas Cohen, profesor de Gerontología, Medicina y Ciencias Biológicas y decano de la Universidad del Sur de California.

La humanina se ha encontrado no sólo en las mitocondrias humanas sino también en todo el reino animal, una señal de que su gen relacionado se ha mantenido, o conservado, a lo largo de la evolución. El estudio, que se publica en la revista científica 'Aging', ha examinado la humanina en varias especies animales, como gusanos y ratones, así como en humanos, incluidos pacientes de Alzheimer e hijos de personas que han alcanzado los 100 años de edad. Los resultados ponen de relieve el potencial de la humanina y otras proteínas mitocondriales para convertirse en tratamientos de las enfermedades relacionadas con la edad.

Más información: El Confidencial

Con la colaboración de