Como era de prever, Julianne Moore se ha alzado con el Oscar a la mejor actriz por su papel de profesora enferma de Alzheimer en Siempre Alice. La actriz no había tenido rival en su categoría y todas las quinielas la daban como firme ganadora este año tras haber sido nominada en cinco ocasiones.
Desde que comenzó la temporada de premios cinematográficos, no ha dejado de ser alabada por un papel complejo y difícil al que dota de una equilibrada vulnerabilidad y por el que se ha llevado todos los galardones en la categoría de mejor actriz, desde el Globo de Oro hasta el Bafta que recogió el pasado 8 de febrero.
La actriz ha agradecido muy emocionada el premio a toda su familia y al equipo que ha hecho posible el filme. "Estoy tan contenta de que hayamos podido hablar del Alzheimer en esta película". "La gente afectada por esta enfermedad tiene que ser vista para que sea posible encontrar una cura", ha dicho en su discurso de agradecimiento.
La pelirroja de Carolina del Norte ha vivido un 2014 intenso lleno de rodajes y fue la destinataria del premio a la mejor actriz en la pasada edición del Festival de Cannes, donde mostraba el lado más enfermizo de Hollywood en la cinta de David Cronenberg Maps to the Stars.
Moore tiene la extraordinaria capacidad de meterse con naturalidad en la piel de cada uno de los seres que interpreta. Es una actriz de sonrisa fácil, de aspecto frágil y dueña de una arrolladora personalidad que hace fácil lo difícil. Lo demuestra con creces especialmente en la piel de Alice, un personaje para el que se preparó leyendo todo lo que pudo sobre el Alzheimer, entrevistándose con familiares de pacientes, con médicos y con presidentes de asociaciones. La película dirigida por Wash Westmoreland y Richard Glatzer está basada en la novela best-seller de Lisa Genova y explora los efectos del drama de una mujer culta, casada y madre de tres hijos adultos que se enfrenta al abismo de perder la memoria.
Moore competía por el premio con su compatriota Reese Witherspoon, en principio la candidata con más posibilidades después de ella por su papel en Alma Salvaje. Las otras eran la francesa Marion Cotillard por Dos días, una noche y las británicas Felicity Jones por La teoría del todo y Rosamund Pike por Perdida.
