Un día a la semana el taller del reconocido ceramista lanzaroteño Juan Brito en Mozaga (San Bartolomé) se convierte en un aula de modelado de barro para cuatro pacientes de alzhéimer y sus familiares del centro de día Las Cabreras, perteneciente a la Consejería de Servicios Sociales del Cabildo.
Consecuente con la tradición de la cerámica de su tierra y empeñado con tenacidad en extender su sabiduría en el arte de piezas aborígenes, Brito va más allá de dar forma con el barro que recoge de la montaña de Las Nieves a vasijas, candiles, braseros, amuletos o las creaciones de gran tamaño de sus criaturas, entre otros objetos.
En esta ocasión, no sólo transmite sus amplios conocimientos de más de medio siglo en el oficio. Casi sin darse cuenta, contribuye a que las personas con deterioro cognitivo "evoquen recuerdos de su pasado, reconozcan objetos con los que trabajaron antes de caer en la enfermedad o que, simplemente, vieron. De ahí el carácter terapéutico de esta actividad", aseguró Manuel Ruiz, presidente de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer de Lanzarote (AFA).
Otro de los aspectos positivos de esta iniciativa, que ayer contó con la presencia del consejero de Servicios Sociales de la Corporación Insular, Marci Acuña, es que "permite la socialización entre los usuarios, ya que la actividad se desarrolla en grupos reducidos, como hacemos en nuestro centro".
El programa del taller de cerámica, explico Ruiz, está basado en la filosofía del método educativo de la educadora italiana María Montessori, quien lo puso en práctica para sus escolares a finales del siglo XIX. Permite mantener o mejorar en los enfermos de alzhéimer habilidades para la realización de actividades básicas de su vida diaria, les proporciona estimulación cognitiva con tareas que tengan significado para los pacientes y contribuye a mejorar su calidad de vida.
Las clases se imparten desde el pasado mes de julio y finalizarán en octubre. Juliana Elvira Rodríguez, María Dolores Duarte, Micaela Hernández e Isabel Paz, esposa de Juan Brito, son las alumnas del ceramista. En el centro de día Las Cabreras se atienden a 49 ancianos de lunes a viernes.
Fuente: laprovincia.es
