La crisis económica no deja de mostrar caras nuevas cada día. La última la ha desvelado la Asociación de Familiares de Alzhéimer Valencia (Afav). Relatan que los impagos por parte de la
administración de las ayudas a la dependencia, unidos a las dificultades económicas que atraviesan las familias, han llevado a incrementar la lista de espera de pacientes que desean acceder a sus centros y a los que no se les puede dar respuesta.
En estos momentos «unas 140 personas» esperan una plaza en las instalaciones de Afav, ya sea paraasistir a la actividad del centro de día o a las actividades de estimulación que se conocen como taller de respiro, según denuncian desde Afav. El periodo de demora también se ha visto prorrogado, mientras el pasado mes de octubre hablaban de una demora de entre cinco y seis meses, ahora apuntan a «medio año e incluso ocho meses».
¿Qué ha pasado para que se haya producido este agravamiento de la situación?Desde Afav señalan que hasta que empezaron las dificultades económicas y los impagos a la dependencia, cuando un paciente tenía que esperar una plaza libre, muchas familias optaban por centros de carácter privado hasta que surgía la plaza.
Ahora, las dificultades económicas y los retrasos en el cobro de las prestaciones, han llevado a que las familias no puedan optar por centros privados y «por eso la lista de espera nuestra aumenta hasta el punto de que se está colapsando». En este momento «hay 70 personasa la espera de plaza para el centro de día, y otras tantas para actividades de la unidad de respiro y talleres de memoria».
A fin de compensar la escasez de oferta ante la gran demanda, desde Afav explican que lo que hacen es reducir los tiempos de asistencia a los talleres.
De esa manera si un paciente acudía tres veces a la semana ahora lo hace dos, de forma que se amplían las posibilidades a más personas. La espera a la que están sometidas todas las personas que han solicitado una plaza y no han podido obtener respuesta comporta un riesgo que genera gran preocupación a las responsables de Afav, pero sobre todo a las familias afectadas. Las instalaciones de esta asociación centran sus actividades en pacientes en los que la enfermedad no está todavía muy avanzada, cuando todavía es posible la estimulación de
los afectados.
La demora que muchos tienen que soportar puede suponer un tiempo en el que los pacientes empeoren y cuando se haya generado la plaza el centro de día de Afav ya no resulte suficiente porque lo que requiera la persona afectada sea una instalación para personas con mayor dependencia.
Así, lamenta que muchos pueden perder la oportunidad de aprovechar algunas terapias. En Valencia solo existe un centro de día para enfermos de alzhéimer en fases iniciales. A ello se suma que los nuevos casos no dejan de producirse, incluso se constata la tendencia creciente en los diagnósticos.
Fuente: lasprovincias