La Fiscalía de Madrid ha hecho pública una nota de prensa en la que defiende a una fiscal acusada de mantener amistad con la presidenta de la Fundación AFAL, investigada por desavalijar a enfermos de alzhéimer.
La nota rechaza las opiniones de un tertuliano que dijo en televisión el pasado 28 de mayo que una fiscal de Madrid que dirime sobre tutelas e incapacidades tiene amistad con la presidenta de la Fundación AFAL, presuntamente relacionada con las presuntas irregularidades cometidas por dicha entidad.
A la vista de la citada emisión, la Fiscalía de la Comunidad de Madrid “se ve en la obligación” de puntualizar que “la fiscal no tiene relación alguna de amistad con la presidenta de la Fundación AFAL, a la que únicamente conoce por motivos de trabajo”.
Indica que, “en contra de lo que se afirmó”, la fiscal citada “no nombra a los tutores de las personas discapacitadas”, puesto que dicha función corresponde exclusivamente, por ley, a los titulares de los órganos judiciales, que en Madrid capital son cinco. El Ministerio Público únicamente tiene la función de proponer al tutor.
En tercer lugar, dice que es “manifiestamente falso” que el juzgado “haya apartado a la fiscal de los casos de tutela más importantes, dado que ningún juez tiene la facultad de apartar a los fiscales de procedimiento alguno”. Tampoco por parte de la Fiscalía se ha adoptado medida alguna para que dicha fiscal deje de intervenir en tales procedimientos.
Finalmente, la Fiscalía explica que desde enero de 2013 esta fiscal ha propuesto en una única ocasión al juzgado que se nombrase a AFAL como tutor de una persona con discapacidad, pese a haber presentado más de 500 demandas de discapacidad en ese periodo.
En consecuencia, la Fiscalía de la Comunidad de Madrid asegura que “tiene en alta estima la profesionalidad y la labor que diariamente viene desarrollando esta fiscal, sobre la que nunca ha habido queja alguna”, y recuerda que hay abiertas diligencias de investigación para esclarecer los hechos.
La Fundación AFAL Futuro está siendo investigada por apoderarse supuestamente de bienes de varios enfermos de alzhéimer que tutela durante la última década, a través de empresas ligadas a su cúpula. A medida que la enfermedad se agravaba, los bienes de algunas de las personas que la fundación tenía bajo su tutela habrían ido menguando de forma sospechosa.
Fuente: lainformacion.com