El domingo fallecía una persona pública de primer orden como es Adolfo Suárez, primer presidente de la actual democracia española. Moría tras padecer durante 11 años la enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, pocas veces ese término ha sido utilizado estos días por los medios de comunicación.
¿Por qué cuesta tanto a dichos medios escribir o verbalizar la palabra Alzheimer cuando esta enfermedad afecta a una persona pública? ¿Les parece más digno utilizar grave enfermedad neurodegenerativa?
Con el uso eufemístico de esos términos, se hace un flaco favor a la cada vez más necesaria sensibilización social sobre el Alzheimer, una enfermedad que el 10% de mayores de 65 años y el 50% de mayores de 80 años somos candidatos a padecer.
Me gustaría recordar que en el mundo hay más de 35 millones de personas enfermas de Alzheimer, cifra que se elevará hasta los 115 millones en 2050.
En España, hay más de 1,6 millones de personas enfermas de Alzheimer y el coste derivado de la atención a las personas con esta enfermedad se eleva a 31.000 euros anuales de media por familia.
En mi humilde familia, mi madre y mi padre padecieron Alzheimer, no nos avergüenza reconocerlo, como lo hacen miles de familias afectadas.
¡¡Dejemos de estigmatizar y llamémosle por su nombre: ALZHEIMER!!
Koldo Aulestia Urrutia es presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Personas con Alzheimer y otras Demencias (Ceafa).
Fuente: Elmundo.es