Actualmente, la mayoría de los casos de alzheimer se diagnostican a partir de la sospecha clínica del especialista. Es decir, los profesionales, como en otras muchas patologías, determinan que un paciente padece esta enfermedad tras descartar otras causas de los síntomas detectados en el enfermo. El especialista en Deterioro Cognitivo del Servicio de Neurología del hospital Universitario Clínico San Carlos, Alberto Marcos Dolado, explica a ConSalud.es que "el diagnóstico clínico del alzheimer tiene actualmente una fiabilidad de un 80%".
Además, añade el especialista, si no hay otras causas, "haces un mínimo seguimiento de, normalmente, seis meses a un año. Y en ese tiempo la enfermedad suele dar la cara". Los neurólogos recuerdan que la enfermedad de Alzheimer es una patología que no cuenta con tratamientos curativos, por lo que "no es tan importante" que el paciente aguante tanto tiempo sin un diagnóstico 100% certero.
"Si hubiera tratamientos curativos, sí sería importante no retrasarlos durante seis meses, por ejemplo", aclara Marcos Dolado. Aún así, cada vez se avanza más para intentar llevar a cabo un diagnóstico precoz o más temprano de la enfermedad. De hecho, los especialistas informan sobre varias pruebas médicas que existen al respecto, más allá de la sospecha clínica.
A través de ellas, se pueden detectar niveles anormales de determinadas proteínas que son características de algunas enfermedades neurodegenerativas como la del Alzheimer. De hecho, según el neurólogo del Clínico San Carlos, Marcos Dolado, "una simple punción lumbar" es eficaz en este sentido. Por otro lado, también hay medios especializados en medicina nuclear, como determinados tipos de PET, capaces de localizar este tipo de proteínas que pueden dar señas y determinar que una persona padece la enfermedad de Alzheimer.
DETECCIÓN DE LA ENFERMEDAD A TRAVÉS DE LA PIEL
En este contexto, el último avance sobre pruebas diagnósticas señala a la piel como nueva fuente de datos para ayudar a los especialistas en la detección de enfermedades como la de Alzheimer o Parkinson. Una investigación del hospital Central de San Luis Potosí, en México, ha determinado que a través de una biopsia de la piel se puede concluir el diagnóstico de estas patologías. El estudio se presentará en abril en la reunión anual de la American Academy of Neurology.
No obstante, el doctor Alberto Marcos Dolado, aunque reconoce que este tipo de investigaciones siempre son positivas, aclara que no supone "un cambio revolucionario", ya que lo que se consigue conocer del paciente a través de la biopsia de piel se puede lograr con otro tipo de procedimientos ya existentes: las proteínas características en este tipo de patologías neurodegenerativas.
Fuente: consalud.es