Todos hemos escuchado el dicho “la risa es la mejor medicina”. Pero según una nueva investigación, un cambio notable en lo que nos hace reír puede no ser una buena señal para la salud cognitiva: puede ser un indicador temprano de la demencia.
Investigadores de la University College London (UCL) en el Reino Unido encontraron que las personas cuyo sentido del humor se hizo más oscuro con la edad, eran más propensos a tener la variante conductual demencia frontotemporal (bvFTD)