Sintomatología y evolución. Estos dos aspectos fundamentales para abordar y afrontar las demencias en general y la enfermedad del alzhéimer en particular, han centrado el primer seminario informativo del año impartido en Toro por la Asociación de Familiares y Amigos de Enfermos de Alzhéimer y otras Demencias de Zamora (AFA) y que se enmarca dentro del programa de atención a familias.
La psicóloga de la asociación, María Rodríguez Poyo, fue la encargada de impartir este seminario en el centro terapéutico "Palacio de Valparaíso", en el que participaron familiares de personas que padecen algún tipo de demencia y que han asumido el papel de cuidadores, voluntarias de la asociación y personas interesadas en ampliar sus conocimientos sobre las demencias en general y, de forma concreta, en la enfermedad del alzhéimer. Destacó la psicóloga que, con este seminario, la asociación ha retomado de nuevo el programa de atención a familias en la comarca de Toro y, por este motivo, se decidió abordar una "parte básica", en referencia a las demencias en general y el alzhéimer en particular, su sintomatología y evolución, así como los tratamientos, con el objetivo de que todos los participantes "tengan conocimiento de lo que viven en el día a día". Asimismo, este seminario informativo sirvió a los participantes para entender conductas o reacciones de los enfermos y, a partir de este conocimiento, "poder afrontarlas y no achacarlas al propio enfermo". En este taller, los participantes también pudieron ampliar sus conocimientos sobre los síntomas que pueden alertar a los familiares sobre si una persona puede padecer alzhéimer.
Desorientación
Así, Rodríguez destacó algunos síntomas como la desorientación temporal, espacial y, en aspectos de la vida diaria, "no recordar cosas que antes se realizaban con destreza, como olvidar los ingredientes de la comida o una cita médica", aunque también la enfermedad puede afectar al lenguaje. Si se detectan estos síntomas, como recomendó la psicóloga de la asociación, el primer paso es acudir al médico de Atención Primaria para que derive al paciente al neurólogo, quien se encargará de la evaluación y del seguimiento de la persona. No obstante, apuntó que lo más beneficioso para el enfermo es que, en el momento en el que el especialista detecta la enfermedad de alzhéimer o una demencia, los familiares recurran a la asociación donde recibirá una atención adecuada.
La asociación comenzó a trabajar en Toro en el año 2009 y, desde entonces, ha ayudado y asesorado a cerca de 40 familias de la comarca. En la actualidad desarrolla su trabajo en el palacio de Valparaíso y, de cara al futuro, tiene previsto convertir el palacio en un centro de atención integral a personas con demencia aunque, en un futuro, también ofertará el servicio de residencia.
Fuente: laopiniondezamora.es
