El incremento en el número de personas con la enfermedad de Alzheimer en nuestro país sigue animando a importantes grupos geriátricos, como Clece, SARquavitae, Ballesol, Vitalia, Geroresidencias-La Saleta, Adavir o Amma ha seguir ampliando y adaptando sus plazas para ser ocupadas por personas con deterioro cognitivo. El panorama actual, con 1,2 M de personas afectadas de Alzheimer y otros deterioros cognitivos, según la Confederación Española de Asociaciones de Familiares con Alzheimer (Ceafa), invita también a otras entidades, como las fundaciones San Rosendo, Rey Ardid o Salud y Comunidad, a seguir especializando sus centros en este tipo de usuarios, que necesitan una atención individualizada, porque cada uno tiene una sintomatología diferente y las soluciones que valen para unos enfermos no sirven para otros. El Informe 2016 de Centros y Unidades de Alzheimer en España, publicado por Alimarket Sanidad y Dependencia, analiza las tendencias y opiniones de los principales grupos y entidades sociales, quienes están apostando más por la creación de unidades específicas de Alzheimer dentro de sus residencias, que por la apertura de centros monográficos.
De las administraciones se demanda una adecuada planificación, que permita la coordinación entre los servicios sociales y sanitarios y la creación de un marco normativo estable y uniforme. Y, en paralelo, poner la tecnología al servicio de este colectivo se presenta como una de las principales tendencias para mejorar el tratamiento y calidad de vida de los enfermos, mientras familiares, investigadores y operadores geriátricos continúan esperanzados en los avances de la investigación de la enfermedad. Pero mientras llegan los resultados, el grueso de los operadores sigue implementando distintas novedades y terapias para ir mejorando la calidad de los usuarios afectados.
Fuente: Alimarket