Está demostrado científicamente. Ya no es un decir que el perro es el mejor amigo del hombre porque las investigaciones han dado como resultado circunstancias asombrosas que hacen posibles los perros. «Por ejemplo, que acariciarlos baja la tensión arterial o que son capaces de detectar si una persona tiene cáncer de colón», dice Francisco Flores, psicólogo de la residencia de mayores Gerón, situada en la carretera de Carmona.
Por tercer año consecutivo los residentes están participando en una terapia con perros que tiene como objetivo potenciar las relaciones entre ellos y mejorar su nivel de socialización en el centro. La actividad, se desarrolla desde el pasado diciembre y hasta mayo, en colaboración con el Máster en Aplicaciones del Perro a la Terapéutica Humana, de la Universidad de Sevilla.
De esta forma, todos los miércoles, un perro adiestrado, con su guía y un terapeuta visitan las instalaciones de la residencia para trabajar durante una hora con la quincena de mayores que participan en estas prácticas pioneras en España. Sandra Sánchez, terapeuta en estas sesiones, explica que el trabajo se centra en mejorar la socialización de los mayores. «Para nosotros
