Más de 400 personas han comenzado a realizarse pruebas genéticas de saliva para iniciar la primera terapia preventiva para la enfermedad de alzhéimer, un programa de investigación internacional del que forma parte Quirónsalud Madrid con la colaboración del Hospital Ruber Juan Bravo.
Según informó el centro hospitalario este jueves, este programa busca reclutar personas sanas a las que se les tomará una muestra de saliva para detectar si portan una variedad del gen de la apolipoproteína E4 (APOE4).
El jefe del servicio de Neurología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid y del Complejo Hospitalario Ruber Juan Bravo, el doctor Rafael Arroyo, explicó que "estas personas tienen en torno a un 50% de posibilidades de desarrollar la enfermedad de Alzheimer en los siguientes 10 años. Queremos encontrar a estas personas y proponerles participar de forma totalmente gratuita en el primer ensayo clínico a nivel mundial de fármacos para tratar de prevenir la aparición de esta patología".
Para más información: El Economista