Asistencia sociosanitaria. Actividades terapéuticas y de ocio. Y un lugar cómodo y tranquilo para vivir con calidad de vida y acompañado. Y todo ello en un entorno privilegiado en el centro de Valladolid. Esto es lo que ofrece Allegra Magna, la nueva cooperativa de mayores que acaba de ver la luz en esta ciudad de la mano de José María Alaejos para dar respuesta a las personas mayores que quieren ser dueños de su futuro y decidir sobre cómo quieren envejecer.
Esta cooperativa, aún en ciernes, dirigida a cualquier persona mayor de 50 años, promueve la construcción de entre 70 y 72 apartamentos, de 50 metros cuadrados útiles y otros doce compartidos, que contará con todos los servicios necesarios para que una persona mayor tenga autonomía además de dar solución a una posible situación de dependencia. De momento, y en apenas cuatro semanas que lleva en marcha este proyecto, ya son treinta los socios que forman parte de esta cooperativa. «La gente lo va conociendo poco a poco y lo cierto es que está habiendo bastante interés», señala a LA RAZÓN José María Alaejos, ilusionado ante este proyecto, del que existen una docena de ellos en toda España, y otro más en Valladolid, aunque no en el centro de la ciudad, y que pretende convertirse en referencia.
De las treinta personas que ya se han apuntado, la mayoría son matrimonios. Y entre los que están solos, hay más mujeres que hombres, señala Alaejos, quien cuenta también que la mayor parte son de Valladolid excepto una persona que es de Soria, pero que ha decidido ser socio y comprar un apartamento en esta cooperativa porque tiene a su familia viviendo en la capital vallisoletana, y para él es mucho más cómodo.
«En mi casa»
Respecto al edificio, cabe señalar que se construirá en unos terrenos del Ejército entre las calles Álvarez Taladriz y Toreros, muy cerca de El Corte Inglés del paseo de Zorrilla. Tendrá cuatro alturas, y en su planta baja dispondrá de una residencia en la que se instalarán tres unidades de convivencia que sigue el modelo «En mi casa», por el que está apostando firmemente la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades.
Un modelo con acceso totalmente independiente, que estará gestionado por una empresa especializada de asistencia a las personas mayores que atenderá a los vecinos de los apartamentos que lo deseen. Para hacerse socio, los interesados deben abonar 1.000 euros para hacer la reserva y elegir apartamento. Deberán hacerlo en las oficinas de la inmobiliaria AGC en la calle Santa María, 20 de Valladolid. Según explica Alaejos, cada inmueble cuesta en torno a los 120.000 euros, diez mil euros arriba o abajo en función de la ubicación del mismo. Mientras que para aquellos que quieran disponer de los servicios sociosanitarios básicos de la residencia, tendrán que pagar también alrededor de 190 euros al mes por persona.
Entre ellos, teleasistencia las 24 horas de los 365 días del año, limpieza del apartamento una vez al mes o la posibilidad de usar todos los espacios comúnes. Pero, además, esta cooperativa ofrecerá otras dotaciones como servicios de peluquería y podología, comedores privados, gimnasio, piscina climatizada con cloración salina y amplios jardines.Un proyecto que será también fuente de riqueza y empleo, puesto que durante las obras, que arrancarán en marzo del próximo año, trabajarán 75 personas. Mientras que en la residencia se dará empleo a una treintena de profesionales entre cuidadores, fisioterapeutas, médicos o personal de limpieza.
La inversión asciende a 11 millones de euros y, según estima Alaejos, el edificio podría estar terminado en verano de 2019.
Las fuentes de la edad
Además de ser el impulsor de este ilusionante proyecto de cooperativa para mayores, José María Alaejos preside la Asociación «Las Fuentes de la Edad» de Valladolid, que tiene como objetivo hacer más partícipes a las personas mayores en la sociedad y que éstas envejezcan dignamente y con calidad de vida. También dirige y coordina una revista bianual del mismo nombre. Se trata de una completa publicación con entrevistas, reportajes y numerosos artículos sociales, históricos y, sobre todo, culturales, dirigidos especialmente a las personas mayores y su bienestar. Una revista, que en palabras de Alaejos, «pretende ser cronista y testigo de la realidad diaria de las personas mayores, de su sabiduría y experiencia, pero también de sus amrguras y tristezas». «Las Fuentes de la Edad» es una asociación solidaria y que se implica con la sociedad. No en vano, en su último número, se editaron un millar de ejemplares, cuya recaudación, derivada de un donativo voluntario de 5 euros, se destinará íntegramente a favor de la Asociación Familiar de Alzheimer, que servirá para ayudar a que pueda seguir prestando sus servicios a los enfermos de esta enfermedad y sus familias. Algo que ya hicieron el pasado año también con la Asociación Española contra el Cáncer.