Un equipo de científicos ha diseñado un nuevo colorante capaz de detectar, en un mismo experimento y en solo 20 minutos, la presencia de fosfato y biotioles en el interior de células vivas. Este avance podría servir para diagnosticar de manera precoz la enfermedad de Alzheimer y otras como la osteoporosis, la diabetes tipo II o el cáncer de próstata, ya que los niveles anormales de ambas sustancias son un claro síntoma de ellas.
Se trata de la primera vez que se logra sintetizar una sonda que es capaz, por ella misma, de detectar las dos sustancias en el mismo experimento, ya que normalmente este procedimiento se hace utilizando dos fluoroforos o distintos experimentos. El interés científico que tiene medir los iones fosfato radica en que puede aplicarse en la valoración de la biodisponibilidad de fármacos empleados en determinadas enfermedades.
Actualmente, sólo se conocen metodologías invasivas para calcular la concentración de fosfato que existe en el interior de los osteoblastos. Para ello se emplea fósforo radiactivo, con los graves inconvenientes que ello conlleva.
Fuente: neurologia.com