Carmen Pérez Novo Ginecóloga La semana pasada les hablaba acerca de una información relacionada con unos consejos del neurocientífico español Paco Mora que tienen como objetivo mantener un cerebro sano, retrasar su envejecimiento y que, incluso, nos pueden ayudar a posponer la llegada de enfermedades discapacitantes, tales como el alzhéimer, párkinson o demencia senil.
Pues bien, él habla de "12 consejos para mantener un cerebro sano" y que yo trataré de exponerlos con la mayor claridad posible:
1) Evitar el estrés crónico. Y esto es así, porque, el vivir en estas condiciones, tiene muchas consecuencias dañinas sobre el organismo y el cerebro, ya que trae como consecuencia la liberación, de forma constante, de hormonas glucocorticoides que afectan directamente al cerebro. Y algo, con efectos muy positivos, que podemos hacer para contrarrestarlo es practicar algún deporte.
2) Adaptarse a los cambios, o sea, a los tiempos que corren, a las situaciones que tienen lugar en nuestro entorno. Si nos aislamos, si decimos "yo ya soy mayor para esto", "los tiempos pasados fueron mejores", "¡ qué bien se vivía cuando yo era joven!", lo único que conseguimos, según todos los expertos, es estresarnos emocionalmente.
3) No fumar. De todas las personas que vivimos en este planeta, es de sobra conocido que este hábito nocivo puede producir pequeños infartos cerebrales y declinar las funciones mentales. La nicotina produce una reducción de la memoria y la atrofia y muerte de las neuronas. Además, aumenta el estrés oxidativo en el cerebro.
4) Dormir bien. En líneas generales, necesitamos entre siete y ocho horas de sueño reparador cada noche para que nuestro cerebro pueda borrar aquella información innecesaria y reforzar los conocimientos aprendidos. Todos los estudios apuntan a que también es necesario para reparar tejidos dañados.
5) Vivir acompañado. Sí, señoras, señores, señoritas y señoritos, creo que en eso todas y todos estamos de acuerdo: una adecuada salud mental pasa por tener relaciones buenas y constantes con las personas del entorno. La transferencia emocional, tiene muchas ventajas sociales. Todos los estudios apuntan a que quienes viven en pareja y tienen amigos se adaptan mejor a los cambios.
6) Evitar el apagón emocional. La motivación, la ilusión en todas las acciones que llevamos a cabo, es lo que nos empuja a tener verdaderas ganas de vivir. Indudablemente, es el motor que llevamos dentro y que nos mueve a querer seguir estando vivos.
Fuente: Ine.es