Personas con esquizofrenia, Alzheimer y otras condiciones que causan un deterioro grave de las funciones mentales, ocasionalmente recuperaron de manera inexplicable la memoria y la claridad mental poco antes de morir. Su mente parece sorprendentemente volverse completamente coherente, incluso cuando su cerebro se deterioró más que en otro momento.
Pacientes que ni siquiera recordaban su propio nombre durante años pueden reconocer repentinamente a sus familiares y tienen conversaciones normales con ellos sobre el pasado, presente y futuro. Nadie sabe cómo sucede.
Por ejemplo, el médico Scott Haig, escribió en un artículo para la revista Time sobre un paciente joven llamado David, que a pesar de tener tumores en su cerebro, tuvo momentos lúcidos antes de morir. David dejó de hablar y moverse en las semanas anteriores a su muerte. Cuando se escaneó su cabeza, “casi no quedaba cerebro”, explicó el Dr. Haig. Pero en la noche que murió, paso cinco minutos completamente consciente despidiendo a su familia.
“No fue el cerebro de David lo que lo despertó para despedirse”, dijo el Dr. Haig. “Su cerebro ya había sido destruido. La metástasis del tumor no solo ocupa espacio y presiona cosas, dejando un cerebro completo. La metástasis en realidad remplaza tejidoeX03 El cerebro simplemente ya no está”.
“Lo que despertó a mi pacienteeX03 fue simplemente su mente, forzando su camino a través de un cerebro roto, el acto final de un padre para consolar a su familia”.
Para el Dr. Haig, es claro que la mente existe aparte del cerebro. Otros buscan razones fisiológicas posibles para este fenómeno conocido como “lucidez terminal”.
Los estados psicológicos variables de las personas que pasan por la lucidez terminal sugieren que no es solo un mecanismo el responsable, afirman los investigadores de la Universidad de Virginia y la Universidad de Iceland, quienes publicaron “Lucidez terminal: Un resumen y una colección de casos” en los Archivos de Gerontología y Geriatría en 2012.
“En la actualidad, pensamos que no es posible formular mecanismos definitivos para la lucidez terminal”, escribieron los investigadores Dr. Michael Nahm, Dr. Bruce Greyson, Dr. Emily Williams Kelly, todos de la Universidad de Virginia; y el Dr. Elendur Haraldsson de la Universidad de Islandia. “La lucidez terminal en diferentes desórdenes mentales puede resultar de diferentes procesos, dependiendo de la etiología de las enfermedades. Por ejemplo, la cahexia [debilidad y desgaste del cuerpo] en pacientes con enfermedad crónica podría causar disminución del tejido cerebral, aliviando la presión ejercida por las lesiones que ocupan el espacio intercraneal y permitiendo el retorno fugaz de algunas funciones cerebrales”.
Algunos pacientes a quienes se les retiró el soporte vital, manifestaron un surgimiento transitorio de la actividad eléctrica del cerebro.