El robo de la recaudación de la venta de lotería de Navidad ya se ha convertido en un acto delictivo habitual por estas fechas. Este año le ha tocado a los vecinos de Trabanca Badiña, a los que le han arrebatado 1.500 euros en efectivo procedentes de las participaciones.
Hace unos días los ladrones entraron en el centro sociocultural de madrugada, reventaron la cerradura y accedieron al despacho de la asociación de vecinos "San Miguel" y al del colectivo de Mulleres Rurais. "Solo buscaban dinero, porque los ordenadores y televisores quedaron intactos", apunta el presidente vecinal, Faustino Laya.
Además de los 1.500 euros procedentes de la venta de lotería, los cacos completaron su botín con algunas participaciones sueltas que Faustino guardaba en los cajones de la mesa. Por si esto no fuera poco, "la lotería que compré yo personalmente también la tenía en esos cajones y me la llevaron toda", lamenta. Calcula que tendría a título individual -no perteneciente a la asociación- unos 14 o 15 décimos y varias participaciones, por lo que el valor podría superar los 400 euros.
El presidente de la asociación "San Miguel" cree que los ladrones "conocían bien el ambiente". "Yo suelo ir al banco todos los días a ingresar dinero y ese día no fui porque tenía que ir a Santiago a una cita médica", indica Faustino. Cuando por la tarde acudió a la casa cultural de Trabanca Badiña se encontró con la cerradura de la puerta principal totalmente destrozada, al igual que los cajones de su mesa. "También rompieron cosas en el despacho de las Mulleres Rurais buscando dinero para robar", agrega.
El colectivo vecinal ha presentado denuncia ante la Comisaría de la Policía Nacional y ha puesto en conocimiento del Concello el suceso, puesto que las instalaciones son de titularidad municipal.
Para los vecinos ha sido "una auténtica faena" lo sucedido, pues dicen que tendrán que pagar los 1.500 euros que les han sido sustraídos de la venta de lotería.
Hace un par de semanas Trabanca Badiña acogió otro robo, en aquella ocasión en las dependencias de la asociación de ayuda a enfermos de alzhéimer y sus familiares Afasal, en el edificio conocido como del doctor Carús, donde los cacos causaron daños en el inmueble y sustrajeron diverso material informático. Así, se llevaron dos tablets, un ordenador portátil y una cámara fotográfica, además de una cantidad de dinero en efectivo que no ha sido concretada.
Fuente: Faro de Vigo