De 8.000 a 10.000 almerienses padecen Alzheimer. La degeneración neurológica que caracteriza a esta patología obliga a movilizar recursos sociales, sanitarios y familiares. El programa ‘Al lado’ de la Consejería de Salud y Bienestar Social, en el que Almería participó como pionera desde hace dos años, empieza a dar sus frutos y ya se aborda la situación desde todos los ámbitos sociales y sanitarios.
Ayer fueron casi un centenar de profesionales, familiares, cuidadores y enfermos los que se reunieron en una jornada que pretende ver el problema y las soluciones desde diferentes puntos de vista. El objetivo: ralentizar el avance de la enfermedad y estar preparados para atender al enfermo desde todos los ámbitos.
Proyecto enriquecedor La responsable de Salud Pública en Almería, Pilar Barroso, explicó cómo la unión de todos los factores implicados en el diagnóstico y el tratamiento de los pacientes, es “enriquecedora”. Incluida la participación, siempre que se pueda, del propio afectado.
El coordinador de la estrategia ‘Al lado’ para toda Andalucía, Rafael Muriel, hizo especial hincapié en que el programa de salud busca acompañar, desde los primeros estadíos hasta el final de la enfermedad, a enfermos, familiares, profesionales del ámbito de la salud y el bienestar social, asociaciones de afectados y cuidadores.
“No se trata de ir ni delante, ni detrás, sino al lado de todos ellos”, aseguró. Para ello conviene estar coordinados y dar prioridad a la comunicación. Se trata de abordar un asunto desde todas las miradas posibles para mejorar.
A través de talleres y encuentros, con pocos recursos económicos pero “mucha voluntad”, todos los agentes implicados en esta enfermedad han logrado poner al paciente y a quienes les rodean en el centro del problema.
Avanzar y mejorar Así lo ve la presidenta de la federación almeriense de asociaciones de enfermos de Alzheimer, Esther Fernández, que apuestan por “seguir avanzando”.
Los talleres en los que han participado todos los agentes sanitarios, sociales y afectados han tratado de ver la enfermedad desde el mismo inicio, es decir, desde la transmisión del mensaje;
