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El alcalde de Deba, Pedro Bengoetxea, participa en el proyecto de Cita Alzheimer
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«Deba se ha convertido en un pequeño laboratorio para la lucha contra el Alzheimer»
«Esto es grande para Deba». Si hay un debatarra implicado en esta iniciativa de Proyecto Deba 2020 es el alcalde de la localidad. Pedro Bengoetxea, candidato de una plataforma independiente y apoyado en la investidura por el PNV. Se ha estrenado en el cargo este año y está dispuesto a que el Ayuntamiento lidere este proyecto desde el punto de vista social, sabedor de que «los científicos también cumplirán su papel» en este ensayo clínico y social de relevancia internacional .
«Deba es ya un laboratorio pequeño para la lucha contra el Alzheimer, lo que supone una oportunidad grandísima para el pueblo. Vamos a conocer cuál es la situación médica de nuestra gente de más edad en lo que se refiere a esta enfermedad. Hay 1.500 vecinos que tienen más de 60 años del total de 5.000 personas que somos en total si incluimos los barrios rurales. Además, podemos ser la vanguardia en la investigación contra esta enfermedad».
La investigación cuenta con la implicación del entramado de la atención primaria de Osakidetza y del hospital de Mendaro, así como con la colaboración de la asociación Afagi. Pero lo fundamental son esas personas que se mueven en Deba y a las que solo se les va a hacer dos test de memoria y un breve cuestionario personal de tensión, peso o altura.
Llegar a los 1.300
Bengoetxea, más allá de las cartas que van a recibir todos ellos, está dispuesto a ir de casa en casa, de caserío en caserío, para convencer a la gente de lo importante que es apuntarse a este estudio y colaborar con él. El alcalde debatarra es optimista con la reacción de sus convecinos, piensa llegar a los 1.300 casos analizados en una primera tanda y percibe en el pueblo una concienciación importante que se plasma desde que aparecieron los primeros movimientos que implicaron incluso al párroco.
«Desde el principio vimos que el voluntariado se volcaba con el proyecto»«En este pueblo vamos a intentar que la enfermedad tenga visibilidad»
«Somos un pueblo pequeño y desde el principio vimos que el voluntariado se volcaba para todo este periodo de sensibilización que se ha producido durante el verano. Creemos que ha calado. Solo hace falta recordar que la gente llenó la iglesia el día de la charla inicial de exposición sobre lo que queríamos hacer. Tengo la sensación de que la gente quiere saber qué puede hacer para colaborar en que Deba sea un referente mundial de la investigación sobre el Alzheimer».
Más allá de la labor que realizan de los científicos y de los médicos como Pablo Martínez Lage o Jorge Taboada, el alcalde Bengoetxea considera que su trabajo es intentar que todo el mundo participe para colaborar de alguna manera en las investigaciones, pero también sacar la enfermedad a la luz para que la vida de pacientes y familiares sea más agradable. «Es una enfermedad que va a más, que cada vez es más frecuente y que, sin embargo, se esconde. No se cuenta muchas veces ni a los más allegados y mucho menos a los vecinos. En este pueblo vamos a intentar que no sea así, que podamos visibilizarla»
La colaboración de la gente de las tiendas, de las cajeras del supermercado o de los restaurantes es fundamental para que el entorno sea amable con el enfermo y más tranquilo para sus allegados. Porque pueden llegar a arreglos con la familia para saber que si determinada persona no les paga es porque no se acuerda de hacerlo. O ayudar cuando ven a la persona despistada en la calle. «Deba es un pueblo pequeño, no tiene por qué haber problemas».
En la importancia de socializar así este mal de Alzheimer coinciden alcalde, voluntarios y médicos. «Es importante que esa persona siga comprando el periódico o el pan. Después ya irás tú a pagarlo», argumentan. «Que nuestro pueblo sea un laboratorio ya es algo grande para Deba. No contemplamos el fracaso en cuanto a la participación. Habrá mil personas dispuestas. Seguro».
Fuente: diariovasco.com
