La Enfermedad de alzhéimer es la segunda que mayor temor suscita en relación a los problemas de salud, sólo superada por el cáncer. Los resultados de una encuesta internacional revelan que la mayoría de los españoles, siete de cada diez, tendría interés en conocer si padece la Enfermedad de alzhéimer antes incluso de sufrir los primeros síntomas. El estudio, realizado en Estados Unidos y cuatro países europeos (Francia, Alemania, España y Polonia) ha sido diseñado y analizado por alzhéimer Europa y la Escuela de Salud Pública de Harvard.
Los resultados, presentados en la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzeheimer, revelan que más del 85% de los encuestados en los cinco países estudiados afirman que si presentaran confusión y pérdida de memoria, les gustaría saber si la causa de estos síntomas es la enfermedad de alzhéimer. Más del 94% desearía lo mismo si un miembro de su familia presentara estos síntomas.
En cuatro de los cinco países, entre ellos España, la enfermedad de alzhéimer era el segundo mayor temor relacionado con la salud después del cáncer. Se pidió al público que eligiera qué enfermedad tenían más miedo de contraer de una lista de siete enfermedades, que incluía el cáncer, la insuficiencia cardiaca y el ictus. Alrededor de la cuarta parte de los adultos en cuatro de los cinco países afirmó que la enfermedad que más temen contraer es el alzhéimer.
El miedo al alzhéimer aumenta con la edad pero, incluso los adultos jóvenes están preocupados, y aproximadamente una de cada siete personas entre 18 y 34 años elige el alzhéimer como la enfermedad que tiene más miedo a contraer de la lista mencionada.
La encuesta revela que una gran mayoría de las personas ha tenido alguna experiencia con la enfermedad de alzhéimer. La mayoría de los encuestados en los cinco países afirma que conoce o ha conocido a alguien con alzhéimer, aproximadamente siete de cada diez en Francia (72%), Alemania (73%), España (77%) y los Estados Unidos (73%), y un 54% en Polonia. Además, alrededor de tres de cada diez encuestados tienen alguna experiencia personal con un miembro de la familia con alzhéimer. En concreto, en España esto ocurre en una de cada tres personas (33%), un dato que varía en el resto de países desde el 19% en Polonia hasta el 42% en los Estados Unidos.
Probablemente este elevado nivel de contacto con la enfermedad de alzhéimer ha contribuido a la amplia identificación de los síntomas comunes, como la confusión y la desorientación, que reconocieron al menos el 86% y el 88% de los consultados, respectivamente.
Pocas personas reconocen la gravedad del alzhéimer, pues solo un 40% sabe que es una enfermedad mortal (33-61%). En España, más de la mitad de la población (53%) lo desconoce. De hecho, el alzhéimer es la séptima causa de muerte en los países desarrollados y la única causa de muerte entre las diez primeras que no puede prevenirse ni curarse
Más escépticos
Por otra parte, los españoles son los más escépticos sobre la existencia de tratamientos para curar la enfermedad. Muchos de los encuestados piensan que ya existe un tratamiento médico o farmacológico eficaz para reducir la progresión del alzhéimer y aliviar sus síntomas, aunque en el caso de los españoles sólo un 27% cree en la existencia de los mismos (frente al 40% de los franceses, el 42% de los alemanes, el 47% de los estadounidenses y el 63% de los polacos). Además, casi la mitad cree que hay una prueba médica fiable para determinar si una persona que sufre de confusión y pérdida de memoria se encuentra en las primeras fases de la enfermedad de alzhéimer (48% de los españoles).
La encuesta también demostró el interés del público por las pruebas predictivas. Aproximadamente dos terceras partes de los encuestados (71% en España) afirmaron que se someterían a una prueba médica que les permitiera saber si iban a padecer la enfermedad de alzhéimer antes de presentar ningún síntoma.
El presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Personas con alzhéimer y otras Demencias (CEAFA), Arsenio Hueros, destaca la importancia de este estudio tanto para el médico como para el paciente. «Existe una fase precoz de la enfermedad en la que el conocimiento de lo que está ocurriendo es importante. Según los datos de la investigación, la mayoría de los españoles prefiere saber si padece la enfermedad, incluso antes de padecer los síntomas, una mentalidad práctica que le ayudará como paciente a enfrentarse en mejores condiciones a ella y a disponer de un tiempo para resolver sus asuntos presentes y futuros».
El presidente de alzhéimer Europa, Heike von Lützau-Hohlbein, explica que «los resultados demuestran la importancia de ser sinceros con los pacientes al diagnosticar la enfermedad. Siempre será difícil recibir un diagnóstico de este tipo, pero los médicos deben permitir que los pacientes y sus seres queridos tomen las medidas adecuadas».
La encuesta, en la que participaron cerca de 3.000 personas, fue diseñada y analizada por la Escuela de Salud Pública de Harvard y alzhéimer Europa y se llevó a cabo con muestras aleatorias representativas a nivel nacional de adultos mayores de edad en cinco países: Estados Unidos, Alemania, Francia, España y Polonia.
Fuente: laverdad.es