El maestro pastelero Juan Vicente Marco (Pastelería Merey) comenzó a madurar la idea hace dos años. Hoy ya es realidad. Los peces de San Pedro Pescador es una iniciativa que une gastronomía y solidaridad. Desde hoy se pueden adquirir las hasta 17 propuestas diferentes de siete obradores burgaleses que han arrancado con una iniciativa que pretenden extenderse por todo el país.
La idea consiste en elaborar un pez con los ingredientes imprescindibles de hojaldre, almendra y una guinda por ojo. El relleno y la cobertura saldrá de la creatividad de los diferentes maestros pasteleros o cocineros ya que la iniciativa está abierta a cocinas de restaurantes. El pastel, que saldrá a la venta para San Pedro pero se tratará de generalizar su uso. «Sirve para todo tipo de celebraciones al estilo del Rosco de Reyes o del rosco de San Lesmes con fechas específicas como el día del Síndrome de Down, del Alzheimer o para cualquier celebración o día en el que en vez de pasteles el cliente solicite un pez solidario», señala el pastelero Juan Vicente Marcos.
El precio es unitario, 25 euros, y el 20% va destinado a fines sociales. La iniciativa tendrá como primeros beneficiarios a la asociación de familiares de Alzheimer (Afabur), que gestionará económicamente los fondos recaudados, la asociación Down España, de apoyo a programas de infancia con Síndrome de Down, y la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Personas con Alzheimer y otras Demencias (Ceafa). «Serán como mínimo cinco euros los que el pastelero ya dona a la asociación con la adquisición de la caja en la que se envuelve el pez solidario, con lo que cuantas más cajas encargue y por tanto más peces venda, más se podrá apoyar el trabajo de estas asociaciones», señala otro de los coordinadores del proyecto, Rodrigo Saiz.
salto al resto del país
El postre alcanza el kilo de peso y está pensado para entre ocho y diez raciones. El objetivo es «generalizar su uso» como reconoce Juan Vicente Marcos. De esta manera el salto a las pasteleras de todo el país se realizará «de la mano de las asociaciones nacionales con las que estamos colaborando». Un proceso que arrancará este mismo verano.
Entre las propuestas ideadas por los siete pasteleros figuran elementos sugerentes para añadir al pez pescador como tejas de chocolate, merengue caramelizado o propuestas interesantes de fuet con cecina o pulpo a la gallega. «Poco a poco se irán haciendo más variedades, después la gente irá pidiendo, más profesionales se irán sumando y así obtendremos la diversidad y creatividad que surge a partir de unos mínimos comunes», señala Marcos. Las propuestas saladas de alguna de las elaboraciones muestran precisamente que es «una idea abierta a cocinas y restaurantes porque lo que interesa es que haya venta, no es un tema cerrado, a partir de la base que cada uno aporte según sus conocimientos, con la ventaja que no hay margen de competencia en precio sino en calidad y variedad», señaló en la presentación. En la misma se disponían hasta 17 variedades del pez solidario que hizo las delicias de los asistentes a la presentación, entre ellos, usuarios de la asociación Síndrome de Down y trabajadores de Afabur.
Fuente: elcorreodeburgos.com