Además de afectar a la memoria, la enfermedad de Alzheimer afecta y daña los cinco sentidos de las personas, afectando sustancialmente su rendimiento, destacó Eliud Robles Almaguer, presidente de la Asociación de Alzheimer de Reynosa. Además, destacó que esta situación es muy común en la etapa intermedia de la enfermedad, pero es una situación que se puede revertir con el estímulo en sus diferentes formas.
El propio Robles explicó que “el problemas no es la persona en sí mismo, sino la enfermedad, que hace que nuestro cerebro procese mal todos los estímulos externos que recibe, pues al ir muriendo las neuronas no tiene esa capacidad de asociación”.
Eliud Robles continuó explicando que en el enfermos de Alzheimer, el tacto es el sentido que más se ve beneficazo, toda vez que quizá no entienda muchas cosas que suceden en su entorno, pero un abrazo o una caricia es mucho mejor que un Te quiero, “A lo mejor no lo entienden, o no saben quien se lo está diciendo, pero si lo abrazo o lo acaricio, es un lenguaje universal que va a entender mejor”.
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