Un simple análisis de sangre podría detectar si una persona va a sufrir demencia una década antes de que comiencen los primeros síntomas. Una investigación de Gordon Wilcock, profesor emérito de la Universidad de Oxford, ha demostrado que ciertas proteínas de la sangre podrían actuar como biomarcadores que muestran que una persona puede posteriormente desarrollar síntomas de alzheimer. Este hallazgo servirá a los médicos para predecir qué personas son más propensas a sufrir la enfermedad y ayudarlas a prevenirla.
Para el estudio, se tomaron muestras sanguíneas de 20 personas que diez años fueron diagnosticados de alzheimer. También se tomaron muestras de personas que ya sufrían la enfermedad y de otras que no han tenido ningún problema de memoria. Tras analizar los resultados, los científicos encontraron que el nivel de proteína era significativamente diferente entre las personas sanas y las que tenían demencia, tanto antes como después de desarrollar los síntomas.
Los hallazgos fueron publicados en la revista "Neurology", la revista médica de la Academia Americana de Neurología. Wilcock, indicó que "esto es importante ya que sugiere que las proteínas alteradas de la sangre pueden ser un marcador de la enfermedad de Alzheimer temprana, posiblemente 10 años antes de desarrollar problemas de memoria significativos. También nos da una mayor información sobre las células cerebrales. Sin embargo, es demasiado pronto para considerar los resultados como un gran avance".
"Estos resultados deben ser verificados en un mayor número de sujetos para estar seguros de que los cambios son suficientemente sensibles y específicos para ser utilizados como prueba clínica, y también si se pueden predecir qué personas asintomáticas desarrollarán demencia".
El doctor Eric Karran, investigador sobe alzheimer en Reino Unido también ha acogido con cautela los resultados: 'Este pequeño estudio es uno de un área de investigación emergente que podría contener una promesa real para el diagnóstico precoz de algunas enfermedades neurodegenerativas. 'Tiene que ser confirmado en grupos mucho más grandes de pacientes para asegurar que los resultados reportados son consistentes. La capacidad para identificar con precisión el alzheimer en las etapas iniciales sería un paso crucial para la investigación, ya que es probable que los nuevos tratamientos tendrían más probabilidades de éxito si se realizan a tiempo".
"También puede proporcionar valiosas pistas sobre los cambios de las células del cerebro durante la enfermedad, lo que ayuda a guiar los esfuerzos para desarrollar tratamientos nuevos y eficaces", concluyó.