Un medicamento similar al estrógeno, raloxifeno, no ha demostrado ningún beneficio en la memoria y las habilidades de pensamiento para las mujeres con demencia por enfermedad de Alzheimer, según concluye un estudio publicado este miércoles en la edición digital de Neurology, la revista médica de la Academia Americana de Neurología.
"Los fármacos que interactúan con los receptores de estrógeno han atraído un gran interés como posible tratamiento para las mujeres con demencia por enfermedad de Alzheimer, pero estudios relativamente pequeños sobre el estrógeno han fracasado a la hora de confirmar algún beneficio -afirma el autor del estudio, Victor Henderson, de la Universidad de Stanford, en Stanford, California, Estados Unidos, y miembro de la Academia Americana de Neurología-. Antes de este estudio, el raloxifeno no había sido evaluado como un tratamiento para el alzhéimer".
Para este trabajo, se separó a 42 mujeres con una edad media de 76 años con demencia de leve a moderada por enfermedad de Alzheimer en dos grupos y se les dio raloxifeno o placebo durante 12 meses. Las mujeres fueron evaluadas en lo que respecta a su memoria y otras funciones mentales en el inicio del ensayo y luego cada tres meses. También se examinó lo bien que podían completar las actividades diarias y se les preguntó a sus familiares o cuidadores acerca de su carga y estrés al inicio, mitad y final del estudio.
El raloxifeno es un tipo de medicamento conocido como un modulador selectivo del receptor estrogénico, que actúa como el estrógeno en algunas partes del cuerpo. En el útero y las mamas, el raloxifeno funciona como un bloqueador de estrógeno, y también se usa para prevenir la pérdida de hueso después de la menopausia. Un estudio previo en mujeres sanas sugirió que el raloxifeno puede reducir el riesgo de deterioro cognitivo o demencia.
Los resultados en las pruebas de habilidades cognitivas en esta investigación no difirieron significativamente entre el grupo placebo y el grupo que tomó raloxifeno. Tampoco hubo diferencias importantes detectadas por los familiares y los cuidadores sobre la cantidad de carga del cuidador o el estrés o en las actividades diarias. Henderson señala que el estudio no fue diseñado para detectar pequeños efectos del raloxifeno en el rango de los proporcionados por medicamentos aprobados para el alzhéimer como donepezil o memantina.
"Hemos encontrado que el fármaco no tuvo ningún efecto significativo en los pacientes después de un año -lamenta Henderson-. Si hay efectos cognitivos en esta población, es probable que sean pequeños. Estos resultados pueden ser valiosos si se considera realizar ensayos futuros de raloxifeno".
Fuente: eleconomista.es