Aunque todavía no está determinada con exactitud las causas exactas que provocan la enfermedad de Alzheimer, si que se sabe que la acumulación de proteína amiloide en el cerebro, es una de las principales causas asociadas al desarrollo de esta enfermedad, puesto que deteriora la células nerviosas. Para prevenir o reducir los síntomas de la enfermedad, impedir la producción de dicha proteína puede ser una de las opciones terapéuticas más interesantes.
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad Técnica de Múnich (TUM) en Alemania, ha comprobado en un modelo de ratón con alzhéimer que un fármaco –un inhibidor de la enzima beta-secretasa, BACE, según sus siglas en inglés– que disminuye la cantidad de beta amiloide en el cerebro, restaura la funcionalidad de las células nerviosas y mejora la memoria de manera significativa.
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