La investigación abierta por la fiscalía sobre la Fundación Afal, entidad supuestamente sin ánimo de lucro que gestiona, por un encargo judicial, el patrimonio de un centenar de enfermos incapacitados, ha puesto de relieve la existencia de peligrosos agujeros negros en el control de las tutelas. En el caso de Afal, la fiscalía investiga el posible desvío de patrimonio de las personas tuteladas hacia la propia entidad
Vigilar al tutor
La Fundación Afal está siendo investigada por haberse, supuestamente, aprovechado de enfermos incapacitados