Guillermo Nagore, periodista navarro, partirá el 4 de marzo desde Finisterre, con la compañía de un buen equipo informático, cámaras y material de comunicaciones, y comenzará su andadura a pie con la vista puesta en Jerusalén. Se trata de un proyecto con el ilustrativo nombre de 'la memoria es el camino', y que promovido por CEAFA (Confederación Española de Familiares de Enfermos de Alzheimer), permitirá acercar y acercarnos a esas pequeñas historias de la gente que sufre y padece el alzheimer.
Serán 7.000 km, 45 semanas y 15 países. Caminará solo tratando de "cambiar esa percepción que la opinión pública tiene de esa enfermedad depredadoraHasta dónde sabemos, no ha perdido la razón. Simplemente, y según el mismo comenta, es ese "tipo de locuras que pasan de vez en cuando por la cabeza para desaparecer cuando se acaba la caña que te ha puesto el camarero en el bar, pero que en esta ocasión se ha ido enredando de tal manera que parece que ya no tiene vuelta atrás". Se trata de una aventura personal, pero que nos permitirá a todos acercarnos a través de su pluma de periodista a esas historias "que disparan directamente al corazón". Para la sociedad será un buen momento para recordar a los gobernantes que habrá que seguir invirtiendo en dependencia, en ciencia e investigación y que a través del camino que recorra Guillermo vayamos haciendo memoria para que estos enfermos y sus cuidadores no caigan en el olvido y en la desesperanza. Mientras empujamos a Guillermo a su destino final será buena ocasión para sentir que alguien nos acompaña también en nuestro camino y que, siquiera sea una pizca de ilusión aliente los días junto a estos enfermos.
Muchos vamos a seguir su camino. Y quedará en nuestra memoria. Las nuevas tecnologías, las redes sociales, nos van a permitir conocer las historias de países variados y culturas diferentes y la visión que tienen ante esta problemática. Conoceremos al enfermo que no sabe llegar a casa o al cuidador, que tras su jornada de trabajo empieza la tarea de repartir cariño para que esa memoria languideciente no se apague.
Serán 7.000 kms, 45 semanas, 15 países. Caminará solo, pero intentaremos que sienta nuestra compañía en su trayecto. Y quisiéramos los que cada día estamos con estos enfermos hacerle saber que ese esfuerzo no será en vano. Ojalá entre todos podamos "cambiar esa percepción que la opinión pública tiene de esa enfermedad depredadora como algo inevitable por una mera cuestión de edad, como si se tratara de un fenómeno metereológico cualquiera, ajeno a la acción del hombre".
Será un buen momento para recordar a los gobernantes que habrá que seguir invirtiendo en dependencia, en ciencia e investigación, para que estos enfermos y sus cuidadores no caigan en el olvido y en la desesperanza
Y a lo lejos, distante y presente, Jerusalén, "esa ciudad mágica en la que cristianos, judíos y musulmanes se empeñan en seguir enfrentándose porque han olvidado, y no por el Alzheimer sino por el sempiterno odio integrista, que hubo una época, en la Granada de Boabdil, en donde decidieron trabajar todos juntos para conseguir una de las pocas Arcadias que han existido en la historia de la humanidad. En el entremedio, 7.000 kilómetros de historias que deben ser contadas".
Suerte, Guillermo, y que tu camino nos llene de historias y que nuestra memoria las acoja durante mucho tiempo. Gracias por tu esfuerzo.
Fuente: bottup.com
